El Central tuvo que subir la tasa y aun así no logró renovar todos los vencimientos de Leliq
A pesar de haber quitado el piso de 60% en las tasas de interés, al Banco Central le está costando mucho acelerar el descenso del costo de financiamiento y seguir con el sobre cumplimiento de las metas monetarias.
Sucede que, como explicó LPO, Sandleris está muy preocupado con la reacción del mercado ante esta nueva etapa y ya avisó que se manejará con "extrema cautela".
Ya el jueves, tuvo que frenar la baja de tasas y aun así, no pudo renovar la totalidad de los vencimientos, generando un efecto expansivo de $12.600 millones, luego de siete días consecutivos donde había absorbido $190.000 millones.
Este viernes el fenómeno se intensificó y directamente la subasta de Leliqs arrojó una tasa promedio de corte de 59,16%, 15 puntos básicos por encima de la rueda anterior.
Nuevamente, solo se pudo adjudicar $159.754 millones de los $189.162 millones que debían renovarse. De esta manera, en solo dos días se generó un efecto monetario expansivo de casi $44.000 millones que desde la entidad que preside Sandleris indican que podría repetirse a lo largo de diciembre por ser un mes donde la base monetaria aumentara por motivos estacionales.
La tendencia, que también se observó en la tasa mínima y la máxima, es muy leve pero refleja la dificultad que tiene el Gobierno quitar este corset sobre el aparato productivo y poder estimular la economía para mejorar en las encuestas y disipar el riesgo político.
En el mercado preocupa que la caída de reservas pueda intensificar la desconfianza en 2019
Como fue mencionado, el riesgo país es uno de los indicadores que más prestan atención en el mercado. Es que una mayor desconfianza podría complicar los próximos vencimientos y generar un círculo vicioso que termine afectando en el mercado cambiario de cara al año electoral.
Por el momento, el dólar se mantiene controlado y esta jornada registró un nuevo retroceso de 36 centavos para cerrar a $38,31 en el promedio minorista. En el segmento mayorista, la baja fue de la misma magnitud para terminar operando a $37,40. El volumen negociado creció un 16%, al operarse 719 millones de dólares en el segmento contado y 49 millones en futuros MAE.
El movimiento de la divisa se vio favorecido por un fortalecimiento a nivel mundial de las principales monedas emergentes, a partir de los datos que indican una desaceleración de la economía de los Estados Unidos. El peso mexicano se apreció un 0,42%, la lira turca un 0,69%, el peso colombiano un 1,24% y el rublo ruso un 0,71%.