Aprueban la ley "antiUber" que permite quitar las licencias a los conductores
La Legislatura porteña convirtió en ley una iniciativa que endurece las penas a quienes transporten pasajeros de manera ilegal a través de la aplicación Uber.
Se trata de un proyecto adelantado ayer por LPO, con el que se busca frenar el avance de la plataforma de viajes y otras modalidades de transporte ilegal en la Ciudad. Uno de los principales cambios es el retiro de licencia e inhabilitación para conducir a los que sean descubiertos. Además, se mantendrán las multas de hasta 200 mil pesos. La norma -impulsada por el oficialismo- fue aprobada con 37 votos a favor, 11 en contra y nueve abstenciones.
"El proyecto es una herramienta fundamental para facilitar los controles y jerarquizar aún más el servicio de transporte de pasajeros. Se trata de sanciones para todos aquellos transportes que presten servicio para el cual no están habilitados o para aquellos que lo hagan sin el permiso correspondiente", aseguró Cristina García De Aurteneche, presidenta de la comisión de Tránsito y Transporte y autora de la iniciativa. La medida está en sintonía con otros países del mundo donde ya comenzaron a limitar este tipo de servicios.
La Ciudad endurece la legislación y podrá quitarle la licencia a los conductores de Uber
El Ejecutivo ya había intentado bloquear el sitio de la empresa norteamericana, aumentar los controles y otra serie de procedimientos que hasta ahora no tuvieron los resultados esperados. De hecho Uber suma en territorio porteño más de 45 mil nuevos usuarios por semana y tiene una cifra similar de conductores.
La pelea entre los taxistas y los conductores de Uber casi fuera de control, el gobierno decidió intentar persuadir a los conductores con sanciones más duras. Por eso la Ciudad avanzará con modificaciones al Código de Tránsito y Transporte porteño.
Desde la empresa pidieron un "debate" sobre las nuevas formas de movilidad. "Perseguir no es el camino. Ya hubo tres proyectos de regulación presentados en la legislatura, pero faltó interés del gobierno a pesar de las sentencias de la Justicia Porteña, la Justicia Nacional y la Justicia de Mendoza que respaldan esta nueva forma de movilidad", explicó Juan Labaqui, gerente de comunicaciones de Uber para Cono Sur.
Según Labaqui, "la Ciudad no hizo nada para abrir una conversación constructiva para resolver esto", teniendo en cuenta que "Buenos Aires es la ciudad donde Uber más crece en todo el mundo". Además agregó que entre 2.000 y 2.500 choferes se agregan cada semana para hacer su primer viaje, y hay 40.000 personas nuevas que lo usan, algo que para el directivo "no va a cambiar".
Uber podría salir a la bolsa en 2019 con una cotización de 120 mil millones de dólares
En la actualidad, los vehículos de transporte de pasajeros que no están autorizados por la Ciudad, como el caso de Uber, si eran descubiertos se les labraba una infracción de 10.000 Unidades Funcionales ($178.500, en la actualidad) por transporte ilegal de pasajeros.
Además, se retenía el vehículo con el que se había cometido la infracción. Con la nueva norma, la infracción es contra el conductor. También son 10.000 UF ($178.500) por transporte de pasajeros ilegal.
Cristina García De Aurteneche.
A esto se incorpora la retención de la licencia de conducir y se le entrega una Boleta de Citación Z (formulario Z) por 72 horas. La licencia será devuelta cuando se abona la infracción. Además, se inhabilitará al conductor por un período de entre siete y 30 días.
Los choferes de taxis pusieron un marco negro y amarillo a la Legislatura porteña, donde festejaron con bombos, platillos y estruendo la aprobación de la norma.
Los taxistas se habían congregado desde las 10 en tres puntos neurálgicos del centro porteño -9 de Julio y Tacuarí, Carlos Pellegrini y Diagonal Norte, y San Juan y 9 de Julio- previo a marchar con sus autos hacia las puertas del Parlamento local, desde donde siguieron la votación.
La norma también penaliza a los micros escolares que transporten manifestantes, que serán sancionados con multas de hasta 35.000 pesos y la inhabilitación del registro de conducir de los choferes.
Sin embargo, el debate, que se extendió por más de dos horas e incluyó también la precarización laboral derivada del uso de aplicaciones informáticas y el estado del sistema de transporte público, estuvo centrado en las sanciones a los conductores de Uber.