Banco Central

Exclusivo: Caputo amagó con renunciar, muy enfrentado con el FMI

En las últimas horas analizó dejar el cargo, cansado de las objeciones del organismo. Cañonero se propuso para reemplazarlo.

Luis Caputo estuvo muy cerca de renunciar a la presidenciadel Banco Central. Al punto que se evaluó la posibilidad de su reemplazo porGustavo Cañonero, actual vicepresidente de la institución. De perfil más técnicoy con buena relación con el staff del FMI -es amigo de Alejandro Werner, elmexicano-argentino que dirige el Departamento del Hemisferio Occidental-, erauna opción posible.

Como reveló LPO en su momento, para ese cargo también semencionó semanas atrás a los economistas Guillermo Calvo, Miguel Kiguel y LeonardoLeiderman. Pero lo que era un rumor este viernes tomó consistencia. Caputopensó seriamente en dejar el Central.

Pero por ahora se queda. La tensión entre Caputo y el FMIviene escalando. Hablan idiomas distintos. El Fondo cree que no tiene políticamonetaria y se contradice. Caputo piensa que en el organismo son unosdogmáticos, que quieren aplicar en la Argentina recetas que no funcionan, nicontemplan la especial relación de los argentinos con el dólar. En los últimos días Caputo le explicaba a quien quisiera escucharlo que más del 95% de los dólares que se vendían en el mercado eran del Central. Es decir, si no ofertaba reservas, la cotización de la divisa podía dispararse con montos insignificantes. Pero no lograba que el FMI entendiera esa particularidad del mercado argentino.

La tensión llegó a su punto máximo días atrás cuando enmedio de las negociaciones del nuevo acuerdo -que se anunciará la semanapróxima y es posible que contemple un desembolso extra de varios miles demillones de dólares-, se consultó al organismo si se podía hacer una ventafuerte de reservas para parar la escalada del dólar y el staff del FMI dijo queno. Caputo desobedeció la orden y vendió cientos de millones de dólares de reservasy frenó la escalada.

Esto le generó una discusión con Nicolás Dujovne, que llevalas riendas de la negociación con el FMI. "Prefiero pedir perdón que pedirpermiso", fue le respuesta cortante de Caputo. El ministro de Hacienda está tratando de cerrar los últimos puntos del nuevo acuerdo con el Fondo, en una negociación que fue bastante más dura de lo que trascendió y que tiene a la política monetaria como su capítulo más álgido.

La tensión llegó a su punto máximo cuando días atrás desobedeció una orden directa del staff del organismo para que no venda reservas y liquidó cientos de millones para frenar el dólar.

El enorme malestar del organismo con Caputo quedó expresadoen una lacerante declaración de su titular, Christiane Lagarde, al diario FinancialTimes. En esa entrevista sostuvo que el FMI pretendía que la Argentina tuviera unapolítica monetaria con "claridad, transparencia, información adecuada ydebida para los operadores del mercado y una mejor comunicación". No serecuerda una impugnación tan directa al presidente de un Banco Central, porparte de la ex ministra de Economía de Francia, que hace de la diplomacia susello personal.

La "nueva" política de poner bandas a la cotización deldólar para acotar las intervenciones del Central cuando supere los márgenes quese fijen, no es motivo de tensión. "Caputo cree que sirven para limitar tantola euforia como el pánico", explicó a LPO una fuente que lo conoce bien.

El Gobierno prevé acordar con el FMI en una semana: negocian la política de intervención del Central

Caputo está convencido que la crisis cambiaria la superó yque lo hizo a pesar del FMI. Nunca se imaginó en un puesto público y quedóafectado por el escrache que le hicieron en un restaurante. "No tieneaspiraciones políticas y está cansado", agregó a LPO la fuente consultada.

Tiene el apoyo total de Macri y de la mayoría del gabinete. Porahora se queda, pero nadie puede garantizar por cuento tiempo más. Surazonamiento es que no puede irse en medio de una corrida, pero si cuando elmercado tenga un horizonte de estabilidad razonable.