España

El Congreso destituyó a Rajoy y el socialismo vuelve al poder en España

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, es el nuevo presidente con apoyo de Podemos y los nacionalistas.

El líder del Partido Socialista español, Pedro Sánchez, cerró este viernes una notablejugada política que terminó con la destitución del presidente Mariano Rajoy y el regreso del PSOE al poder después de siete años.

Como se preveía desde el jueves, Sánchez tenía los votos suficientes para aprobar la moción de censura y este viernes el Congreso destituyó a Rajoy con 180 votos a favor (cuatro más de los necesarios) contra 169 en contra. Es la primera vez desde el regreso de la democracia en España, en 1977, que un presidente es destituido por una moción de censura.

Si bien terminó siendo de una efectividad pasmosa, la jugada de Sánchez (detrás de la cual se señala al Secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos) también fue arriesgada ya que hasta hace 48 horas no estaba claro que pudiera conseguir los votos, lo que probablemente hubiera significado el fin de su carrera política, como pronosticaban el Partido Popular de Rajoy pero también sus aliados circunstanciales de Podemos.

Finalmente, el líder socialista consiguió el previsible apoyo de los diputados dela fuerza que lidera Pablo Iglesias (67 votos), aunque lo que terminó de inclinar la balanza fue el respaldo de los nacionalistas catalanes y vascos, que le aportaron 24 votos. "Una coalición de extremistas, radicales e independentistas", según la definió el portavoz del PP.

En la vereda de enfrente quedaron el PP y los liberales de Ciudadanos, que apoyaban la salida anticipada de Rajoy, pero no un gobierno de Sánchez. La propuesta de la fuerza de Albert Rivera era designar un gobierno técnico y convocar a elecciones en poco tiempo. Es que Rivera lidera todos los sondeos. Pero ahora quedó aislado y se habla d eun gobierno de al menos un año y medio de Sánchez.

En efecto, el socialista tiene un plazo de dos años para convocar a elecciones, aunque difícilmente se extienda tanto ya que su gobierno asume con una marcada debilidad, porque apenas tiene 84 diputados propios sobre 350.

Se abre entonces en España un delicada negociación política para ampliar la base de un nuevo Gobierno de izquierdas -en términos europeos-, que en gran medida pasará por el juego que logren enhebrar Sánchez e Iglesias.

El socialista sabe que integrar de manera directa a Iglesias en su gobierno convulsionaría demasiado a los mercados y un establishment económico que ya está en shock. Pero necesita los votos del líder de Podemos y por eso por estas horas se habla de integrar al gabinete a "independientes" cercanos a esa formación, como una manera de hacer la alianza más digerible para los sectores empresarios.

Antes de la votación, Rajoy afirmó que acepta "como demócrata" el resultado de la moción de censura, aunque no comparte "lo que se ha hecho". La imagen final de la sesión mostró a los líderes del PP y el PSOE estrechando sus manos, en un signo de madurez política inimaginable para los argentinos.

Los socialistas justificaron la moción para censurar al Gobierno con el argumento de que Rajoy no asumió sus responsabilidades políticas después de que la Justicia española condenara al PP por beneficiarse de una trama de corrupción conocida como Gurtel.

La llegada al poder de Sánchez es el corolario de una estrategia que comenzó en 2016 cuando abandonó la dirección del PSOE y su escaño como diputado al negarse a investir a Rajoy, en contra de la decisión de su propio partido. Antes, había competido contra el líder del PP en las elecciones generales y obtuvo un magro resultado histórico, reflejado ahora en la debilidad del PSOE en el Congreso, pese a lo cual igual intentó ser investido presidente, sin éxito. Pero en 2017 recuperó el liderazgo socialista tras ganar las internas.

Sánchez será el tercer socialistaque presidirá el Gobierno español (después de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero).

La salida de Rajoy de la presidencia pone fin a seis años y medio marcados por la crisis económica en España, el fin del bipartidismo con la irrupción de Podemos y Ciudadanos, los casos de corrupción que terminaron forzando su salida y la fallida declaración de independencia de Cataluña.