Cambiemos

Larreta enfrió las versiones de una candidatura presidencial de Vidal

Dijo que lo más "natural" sería que Macri, la gobernadora y él compitan por la reelección.

En los últimos días, un tema se propagó en las charlas de los círculos políticos vinculados al Gobierno: la posibilidad de que Mauricio Macri decida no ir por la reelección en 2019 y la candidata presidencial del oficialismo finalmente sea María Eugenia Vidal.

Sin embargo, Horacio Rodríguez Larreta salió a enfriar esas versiones de manera elegante y en una entrevista con La Nación aseguró que lo más "natural" es que él compita por la reelección como jefe de gobierno porteño, Vidal vuelva a dar la pelea en la Provincia y Macri aspire a prolongar su estadía en la Rosada.

"Lo más natural sería que Macri, Vidal y yo vayamos por la reelección", lanzó y aseguró que se trata de una cuestión que todavía no fue discutida pero que sería "lógica".

Como supo LPO, la idea de la que efectivamente hablaban consultores ligados al Gobierno cobró fuerza en el último mes a raíz de la caída de 10 puntos en la imagen positiva de Macri. En la Rosada miran con preocupación el sondeo que muestra que el Presidente bajó al 42%, un número que habilita el fantasma de un eventual ballotage.

Las versiones de un relevo de Vidal en la pelea grande del 2019 se alimentan de un dato coyuntural: La gobernadora tiene veinte puntos más de imagen positiva que el presidente.

En contraste, Vidal conserva su 60% de imagen positiva a nivel nacional, mientras que Larreta en la Ciudad tiene unos 15 puntos más que Macri, en un clima de malestar entre ambos que el jefe de Gobierno porteño se encargó de desmentir: "Simplemente ahora no tenemos el mismo nivel de cotidianidad", dijo en la entrevista. 

El cuidado extremo que Macri le dispensa a Vidal y la notable sintonía entre ambos, es trabajada con dedicación por la Casa Rosada, que se encargó de subrayar las diferencias de actitud en las fotos que se sacó Macri con Larreta y la gobernadora durante sus vacaciones en Cumelén. El retrato de Macri y Vidal parece en efecto la escenificación de una sucesión.

Las diferencias colaboraron en que volviera a agitarse el debate por la sucesión. Lo cierto es que en la Rosada califican como un "disparate" la posibilidad de que Vidal compita a nivel nacional porque confían en que se revertirá la caída en la imagen de Macri. En rigor, creen que como se vienen tiempos de ajuste el impacto negativo de las políticas recaerá sobre el Presidente, pero aspiran a dar vuelta esa tendencia en el próximo año electoral aumentando el gasto social y la obra pública, al igual que lo hicieron en 2017. Es la reedición del populismo de emergencia que aplicaron con éxito el año pasado. Los años pares son de ajuste, los impares de gasto. 

Pero las versiones también se alimentan desde allegados al presidente, que aducen una supuesta intención de "recuperar" su vida. "Macri está un poco cansado de los controles y protocolos de la Presidencia, podría considerar que tuvo un mandato histórico de sacar a la Argentina del populismo, dar por cumplida su función y dejarla a ella", comentó a LPO una persona al tanto de esas conversaciones.

LPO ya reveló que el presidente empezó a trabajar en su regreso a Boca, para cuando deje la Casa Rosada. Es el lugar en el que fue más feliz y tuvo sus éxitos más impresionantes, reconocen los que lo acompañan en esa tarea, por ahora discreta.

Los encuestadores marcan dos ejes para explicar la caída en la imagen de Macri: la persistencia de la inflación -que es la primer preocupación de la gente- y el hecho de que la agenda reformista del Gobierno no convence ni a sus votantes. 

El punto de inflexión fue la reforma previsional, que generó un quiebre con el votante de Cambiemos. En este sentido, una encuestadora que trabaja hace años con el PRO detectó que cuando Cristina Kirchner era Presidenta tenía un núcleo duro del 30% y al medir la aceptación de sus políticas públicas dentro de ese porcentaje casi todas rondaban en un 90% de adhesión. 

Sin embargo, el núcleo duro de Cambiemos es de alrededor del 24% y la diferencia crucial es que si se mide en ese porcentaje la aprobación a las reformas que lanzó Macri, obtienen tan sólo un 35% de adhesión. "Las propuestas del Presidente no seducen ni a los propios", es la conclusión que dejan los números, en medio de un clima en el que pareciera que al Gobierno le cuesta encontrar su relato.

Una especulación negativa sobre la perspectiva del Gobierno también indica que como el Presidente sigue sin hacer un ajuste real que logre bajar el déficit -y sigue todo apalancado con una deuda que crece de modo exponencial- no sería descabellado pensar que en el segundo mandato haya una crisis mucho más grave que hiciera a Macri elegir correrse del foco y dejar a un sucesor. 

Sin embargo, consultores al tanto de las especulaciones también señalan que si Vidal fuera candidata a Presidenta sería porque la imagen de Macri y su gobierno profundizó su caída y en ese caso la gobernadora tampoco le garantizaría el éxito a Cambiemos. Además, de lanzarla al plano nacional, el macrismo se enfrentaría al vacío que dejaría en la provincia. 

Si bien en Cambiemos se tienen fe ciega para instalar a alguien de cero -la propia Vidal es el mejor ejemplo de esa convicción- si así lo decidieran, también reconocen que una operación de tamaña audacia requeriría tiempo.