Cambiemos

Larreta echó a otro funcionario de Lousteau y tensiona con la UCR

Se trata del hermano de su jefa de bloque en la Legislatura. El radicalismo había pedido conformar Cambiemos.

Con un gesto Horacio Rodríguez Larreta dejó claro que no le dará tregua a Martín Lousteau en la Ciudad: despidió a otro dirigente cercano al economista de un cargo porteño justo después de que la UCR pidiera conformar Cambiemos.

Se trata de Gonzalo Gorbea, uno de los síndicos de AUSA que según pudo saber LPO no continuará en su cargo. Más allá de su cercanía con Lousteau, Gonzalo es el hermano de María Inés Gorbea, jefa del bloque ECO en la Legislatura.

A pesar de que Mauricio Macri quiere que el radicalismo porteño sea parte de Cambiemos, Larreta está empecinado en hacerle pagar a Lousteau el precio de haberlo desafiado en las elecciones legislativas.

"La CC ARI ratifica que no va a avalar acuerdo corporativos que desvirtúen lo que nos comprometimos en la fundación de Cambiemos", apuntó Maximiliano Ferraro desde su cuenta de Twitter. El legislador se refería al pacto que suscribieron Enrique Nosiglia y Daniel Angelici, dos enemigos de Elisa Carrió. Y también a los deseos del nuevo presidente de la UCR capitalina Guillermo De Maya.

La Ciudad es el único distrito del país en donde no se conformó Cambiemos. El PRO y la Coalición Cívica compitieron bajo el nombre "Vamos Juntos", mientras que Lousteau y la UCR se acomodaron bajo el paraguas de Evolución.

El día después de las elecciones en las que Carrió superó al economista por 40 puntos, Larreta apretó las clavijas y comenzó a echar a todos los funcionarios que el ex embajador en Washington había colocado en el gobierno antes de partir a EEUU en 2015.

Lousteau y Gonzalo Gorbea.

El primero en caer fue Federico Saravia expulsado de la presidencia del CESBA. Más tarde le tocó el turno a Luis Cabillón quien tuvo que dejar su sillón en la Corporación Buenos Aires Sur.

Además despojó al bloque de Lousteau de la Vicepresidencia 3° de la Legislatura que le correspondía por tener seis legisladores. Para hacer más grande la humillación el jefe de Gobierno eligió a dedo al Roy Cortina, el interlocutor preferido del oficialismo, pesar de que el socialismo tiene solamente dos diputados.

Incluso Larreta pretendió avanzar y le pidió a Angelici que se metiera en la interna de la UCR porteña para desplazar a Emiliano Yacobitti y Nosiglia de la conducción del partido. Pero Macri tenía otros planes: como anticipó LPO el Presidente pretende que tanto el alcalde porteño como Lousteau compitan en una interna y sumen hacia arriba en las presidenciales. Por eso el "Tano" acordó con Nosiglia su regreso a la UCR.

Mientras tanto, en la Legislatura, el bloque de Evolución se dedicó a rechazar las iniciativas del oficialismo.

En una entrevista con Télam, el jefe del radicalismo porteño, Guillermo De Maya, había considerado que en 2019 estarían dadas las "condiciones" para la conformación de Cambiemos en la Capital Federal. En su análisis, en el próximo turno electoral "no se juega solo la la Jefatura de la Ciudad, lo que se va a jugar es la reelección presidencial y (Mauricio) Macri no podrá darse el lujo de tirar por la ventana a nadie".