De Vido eludió el operativo en su casa y se entregó en Comodoro Py
El ex superministro Julio de Vido logró eludir este miércoles el impresionante operativo de Gendarmería que se armó para concretar su detención en su departamento de la avenida Libertador y se entregó por sus propios medios en Comodoro Py, luego de que esta mañana en Diputados se aprobara su desafuero.
En el cuarto piso de Comodoro Py, que estaba cerrado y custodiado por la Policía Federal, De Vido y sus dos abogados, Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, fueron recibidos por el juez Luis Rodríguez, quien dispuso su detención por la defraudación en el proyecto d ela mina de Río Turbio, que se estima produjo al Estado un perjuicio de unos 26 mil millones de pesos.
El ex ministro kirchnerista quedó detenido de inmediato y fue trasladado al hospital del municipio bonaerense de Ezeiza para un chequeo, a raíz de su cuadro de insulinodependiente. Luego sería alojado en la cárcel de Ezeiza o de Marcos Paz, ambas dependientes del Servicio Penitenciario Federal (SPF).
"Mándenle champagne a la doctora Carrió", ironizó el ex ministro de Planificación según fuentes de Comodoro Py. Mientras se entregaba, efectivos de la Gendarmería entraban a su domicilio del edificio ubicado en Libertador y Coronel Díaz -en pleno barrio de Palermo- donde se juntó un grupo de gente que cantaba "Sí, se puede".
Minutos antes, la Cámara de Diputados votó su desafuero y expulsión, por un total de 176 votos, integrados por oficialistas y gran parte de la oposición, aunque con la ausencia del Frente para la Victoria, que decidió no bajar al recinto para el momento de la votación.
La ficha de ingreso de Julio de Vido.
Empecinada con lograr la detención de De Vido, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, incluso mandó a su funcionario Enrique Thomas al Congreso de la Nación mientras se votaba el desafuero, supo LPO. Lo extraño es que voceros del gobierno afirmaron a este medio que les "incomodó" el show de su detención en su domicilio y lo adjudicaron a órdenes judiciales que la ministra se limitó a cumplir.
En paralelo al operativo de Gendarmería en Palermo, se montó el otro gran despliegue de las fuerzas de seguridad montado esta tarde en Comodoro Py, a la espera de que llegara el ex ministro que se hizo presente esta tarde.
Se sabía que el ex ministro quería evitar la foto del chaleco y las esposas, que ya habían tenido que soportar sus subordinados del ministerio de Planificación como José López y Roberto Baratta.
En un primer momento, lo logró: se entregó él mismo en el juzgado de Comodoro Py y el acto de detención se formalizó en el cuarto piso, clausurado para el ingreso de periodistas.
De Vido entro a los tribunales por una calle lateral llamada Letonia, acompañado por su abogado Maximiliano Rusconi, que lo trajo en su vehículo y cruzó los terrenos hasta la entrada del ala del Río a las 15.10.
Fue en ese momento en donde, corrido por periodistas, alcanzó a decir: "Mandenlé champagne a la doctora Carrio", la referente de Cambiemos que activó las causas en su contra cuando hace tres meses dijo que el ex ministro de Planificación kirchnerista era un intocable y pregunto "qué pasa con De Vido".
"Qué caviar, qué champagne", había escrito Carrio el lunes 16 pasado, cuando la Cámara Federal le ordenó a Luis Rodríguez que detuviera al ex ministro por la causa de Río Turbio.
Tras la frase sobre el champagne de De Vido dirigida a Carrió, la diputada respondió con ironía en Twitter. "Que no me manden, porque no tomo alcohol", escribió.
Antes, en esa red social Carrió aseguraba que "para mi termina una lucha de largos años. Tocar a De Vido es tocar el centro del sistema corrupto del gobierno K, sindical y empresarial".
Una vez en el juzgado de Rodríguez y luego de negarse a declarar, De Vido criticó a Macri y Patricia Bullrich por el despliegue de la Gendarmería en su departamento de Libertador y dijo sentir temor por la seguridad de su familia.
Con 67 años, De Vido queda en condiciones en tres años de solicitar el beneficio de prisión domiciliaria, por lo que se intuye podría ser un largo período dadas las decenas de causas que acumula y por la que ya tenía dos pedidos de detención:
Cualquiera sea la cárcel de destino, De Vido quedara bajo el programa de IRIC, se encuadra el programa de "Reducción de Índices de Corruptibilidad", el mismo que ya aloja a detenidos como los ex funcionarios Ricardo Jaime y José López, la ex mano derecha de De Vido, Roberto Baratta, y el contador de los Kirchner, Víctor Manzanares.