Corrupción

De Vido desafió a Macri: "Para hablar de corrupción hay que estar limpio"

"Desafío a Calcaterra o cualquier mandero de Macri a que diga si me coimeó", afirmó el ex ministro.

Julio De Vido tomó aire luego que el juez federal Luis Rodríguez rechazara definir de inmediato el pedido de detención y desafuero del fiscal Carlos Stornelli, lo que en los hechos pone en suspenso esas medidas. 

Este sábado, el ex ministro de Planificación pasó a la ofensiva y dijo que "jamás" se amparó en sus fueros ante las causas judiciales que enfrenta, para luego desafiar al presidente Mauricio Macri a que diga quién lo "coimeó" alguna vez. "Para hablar de corrupción hay que estar limpio y muy pocos de los que hablan lo están", agregó en tono amenazante.

No es un secreto que De Vido concentra información explosiva sobre la red de corrupción que involucra a políticos y empresarios que se hicieron multimillonarios en la década pasada, un hecho que llevó a la diputada Lilita Carrió a pronunciar una frase brutal: "Espero que no lo maten". Lo mismo que activó la discreta defensa del jefe de senadores peronistas Miguel Angel Pichetto y algunos gobernadores de esa fuerza, como reveló LPO.

De Vido arremetió contra "algunos" referentes de su propio espacio y "muchos" del oficialismo, a los que acusó de que "cacarean la honestidad de la boca para afuera" y pidió que ciertos legisladores, en lugar de renunciar a su inmunidad, "que presenten una ley a los efectos de eliminar los fueros para todos y listo", en obvia referencia a Sergio Massa.

En diálogo con radio Rebelde, el ex ministro negó cualquier responsabilidad en el desvío de fondos en la mina de Río Turbio que se investiga y afirmó que siempre estuvo a derecho: "Algunos cercanos a mi espacio y muchos otros del oficialismo estoy seguro de que no resistirían no ocho horas, quince minutos un allanamiento, y se pasan el día hablando de honestidad de la boca para afuera", lanzó.

Algunos de mi espacio y muchos del oficialismo no resistirían ni quince minutos un allanamiento y se pasan el día hablando de honestidad de la boca para afuera, amenazó el ex ministro De Vido.

El juez federal Luis Rodríguez dispuso ayer que todavía "no hay el estado de sospecha suficiente" que justifique un llamado a indagatoria a De Vido en la causa por las malversación de casi 265 millones de pesos en la causa Río Turbio, por lo que el diputado quedó liberado frente a un eventual pedido de desafuero y detención.

El juez dispuso el secreto de sumario y advirtió que se tomará unos días para tomar una decisión definitiva.

El caso de De Vido fue aprovechado por Sergio Massa para renunciar públicamente a sus fueros y desafiar a las otras fuerzas políticas a hacer lo mismo, lo que generó una fuerte interna en la bancada de Cambiemos.

"Para hablar de corrupción hay que estar limpio y muy pocos de los que hablan lo están; hacen como el tero ponen el huevo en un lado y ponen en el otro", advirtió De Vido, que durante su gestión le entregó obras públicas y negocios regulados a empresarios muy cercanos al presidente Macri, como su amigo Nicolás "Nicky" Caputo y su primo Angelo Calcaterra.

"El presidente Macri que dice que yo soy un emblema de impunidad y de corrupción, yo  ejecuté 107 mil millones de dólares en obras; la empresa de él, la del grupo Macri, la que administraba el primo de él, Calcaterra, era la tercer empresa en cantidad de contratos recibidos, entonces yo desafío a que diga Calcarreta, él o cualquier mandadero de él a qué funcionario mío coimeó o si me coimeó a mí", agregó en su tramo más filosos.

Como reveló LPO, De Vido cuando era super ministro no sólo selló un sólido acuerdo con los jueces del fuero federal, sino que mandó a su mano derecha José María Olasagasti a la Agencia Federal de Inteligencia. En el máximo nivel político y empresario se cree que atesora secretos y documentación de la corrupción en la década pasada, como dejó bastante en claro este sábado en su amenaza directa a Macri.

Si bien hasta ahora Macri se había abstenido de cargar contra De Vido, al parecer las presiones de su socia política Lilita Carrió más la posibilidad de un triunfo de Cristina Kirchner en la provincia, parecen haber disparado la decisión de avanzar contra el símbolo más visible de la corrupción kirchnerista.

De Vido no ocultó el enojo que le produce este giro y dijo que se siente una víctima de una "suerte de confabulación o sociedad mediática-política impulsada por el presidente Macri, que tiene algunos adláteres como la diputada Carrió y el ministro Garavano".