Banco Central

Sturzenegger: "La guerra contra la inflación en Argentina está por comenzar"

El titular del Banco Central adelantó que una semana presentará el régimen de metas de inflación para domar los precios.

Este año para las Jornadas Monetarias y Bancarias del Banco Central el tema es la inflación. Por eso, en su inauguración, el presidente del organismo, Federico Sturzenegger, aseguró que “la batalla contra la inflación recién está por comenzar” e instó a los presentes a aprender de países que lograron, mediante un programa de metas de inflación, dominar la suba generalizada de precios.

Los invitados fueron profesores de economía monetaria y otros banqueros centrales de países como Chile, Brasil e Israel cuyas historias con esta cumplieron con el objetivo de “tener una inflación baja que nutra el crecimiento” como la que está “plasmada en nuestro objetivo de una inflación anual del 5% en 2019”, adelantó Sturzenegger

Tras repasar la evolución de la inflación y las medidas de tasa de interés fijadas durante estos nueve meses para domar los precios del 6% mensual de abril al 0,9% de agosto, el titular del Banco Central, recordó que con una inflación cercana al 1% mensual muchos países dieron comienzo al plan de metas de inflación que Sturzenegger anunciará el próximo lunes.

“Lo que ocurrió hasta ahora, fue como preparar el campo de batalla de la lucha contra la inflación. La guerra contra la inflación en Argentina está por comenzar. Acá es donde es fundamental entender el proceso por el cual otros países transitaron esta batalla”, explicó el funcionario.

Además del objetivo inflacionario, el titular del Banco Central enumeró otros dos objetivos: “desarrollar el financiamiento e incorporar al sistema financiero tecnología e innovación para eliminar el (uso del) efectivo”. Estos temas serán abordados con mayor profundidad el día martes cuando su asesor personal y titular del Banco de Suecia, Stefan Ignves, aborde la temática.

En lo que hace al desarrollo del sistema financiero, el funcionario sostuvo que en la actualidad “es transaccional”, por lo que “debemos avanzar para crecer con equidad”, logrando el desarrollo de “activos financieros de largo plazo”.

“Sin un sistema financiero fuerte no hay equidad”, destacó el titular de la Autoridad Monetaria, quien comentó que en la actualidad el sistema sólo presta al sector privado “un 15 por ciento del producto bruto interno (PBI)” y que “más del 80 por ciento de los depósitos en pesos son a un mes” de plazo”.

“La volatilidad macroeconómica hizo que se ahorre en moneda extranjera, pero esto puede revertirse”, señaló Sturzenneger, y volvió a repetir que “quien tenía 100 pesos en la década del 80 hoy tendría (por las distintas devaluaciones) 1,5 pesos” de haberlos reinvertido en plazos fijos en pesos todo este tiempo, mientras que “Quien haya invertido en inmuebles en 1981 tendría un 598%, si computamos la capitalización en el rubro inmobiliario de los alquileres que haya ido cobrando.”

“La inversión en dólar billete, a diferencia de lo que habitualmente se piensa, ni siquiera permitió conservar el poder adquisitivo: se obtendría únicamente un 77% del valor invertido”, remarcó mostrando la ineficacia del sistema financiero para captar ahorro y remunerarlo mediante la asignación del capital a proyectos productivos. Esta incapacidad es, para Sturzenegger la razón del modesto tamaño del sistema financiero y su circunscripción acotada al dinero transaccional.

Tras destacar las normas de “regulación prudencial” que utiliza el BCRA desde hace años, Sturzenegger hizo hincapié en la necesidad de avanzar en “la bancarización” de la sociedad, incorporando “nuevas tecnologías e innovaciones en los medios de pago”. “Con menos circulante, la evasión, la corrupción y el narcotráfico ven sus objetivos debilitados”, subrayó el funcionario.

Aun así, Sturzenegger estableció prioridades y dejó a estos dos objetivos en el segundo lugar. “Nuestro objetivo primordial es la estabilidad monetaria con baja inflación”, afirmó el titular de la Autoridad Monetaria, quien consideró que “la Argentina tiene un largo camino por recorrer en materia macroeconómica”.