La manifestación, realizada frente al edificio de Sarmiento 329, entre estaba encabezada por Jorge Altamira, Vila Ripoll, Pablo Miceli, Víctor De Genaro y Miguel Bonasso, entre otros dirigentes políticos. Además, participaron miembros de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos y Madres de Plaza de Mayo.
Altamira reclamó la renuncia de Julio Alak por "la banalización de la ex ESMA" y porque consideró que el Gobierno "no tiene títulos para monopolizar la memoria" del mayor centro de detención de la última dictadura militar.
El dirigente del Partido Obrero denunció que la del ministro "es más que una política de asados" y agregó que "es una política de ahogo a quien mantiene una posición independiente en el tema de derechos humanos y una política de cooptación a los acólitos del oficialismo".
Por último, criticó al Gobierno porque "se arroga el monopolio de la memoria y no tiene ninguna autoridad para hacerlo porque es un Gobierno compuesto por notorios representantes de los intereses económicos a los cuales combatió la mayor parte de los que terminaron secuestrados, desaparecidos".
"La Escuela de Mécanica de la Armada es un símbolo. No le pertenece a la exitosa abogada de La Plata Cristina Kirchner y ni siquiera al transformista de Alak", se quejó, a su turno, el ex diputado Miguel Bonasso.
La protesta se desarrolló en el marco de un importante operativo de seguridad que incluyo el bloqueo con vallas de la cuadra de Sarmiento entre Reconquista y 25 de Mayo. Esto provocó el malestar de los manifestantes ya que no podían acceder con facilidad a la zona donde se llevó adelante la protesta.