El ministro de Justicia, Julio Alak, pidió hoy investigar la denuncia que hizo el testigo Alfonso Severo y afirmó que el hombre vinculó su supuesto secuestro a sectores que buscan impedir el cumplimiento de la Ley de Medios y "el proceso de desinversión que tiene que culminar y cumplir el multimedio Clarín".

El funcionario dijo que Severo "está denunciando un hecho gravísimo para amedrentar a la Presidenta de la Nación (Cristina Fernández), al Gobierno y al Parlamento para que no avance en un acto decisivo como es dar por cumplido el 7 de diciembre el proceso de desinversión que tiene que culminar y cumplir el multimedio Clarín".

Durante una conferencia de prensa brindada en la sede del Consejo de la Magistratura, en esta capital, Alak le agradeció a Severo "sus palabras y la información que proporcionó".

"La aseveración de Severo, que este secuestro que sufrió ayer es para perjudicar a la Presidenta de la Nación, hay que investigarla", insistió.

Alak afirmó que "esto podría ser, su privación de la libertad, una manera de amedrentar a una Presidenta que se ha caracterizado siempre por una enorme valentía que le permitió llevar adelante un programa de transformación inédito en la Argentina junto a Néstor Kirchner".

"En este episodio quiero manifestar la alegría, nuestra satisfacción por la aparición con vida de Severo. Clarificó en forma pública que él no había solicitado ingresar al programa de protección de testigos", prosiguió.

Precisó que "a ese programa solamente se puede acceder si o pide la Justicia y el interesado está de acuerdo. Muchas veces, el Ministerio ha querido incorporar testigos a este programa y el interesado no está de acuerdo con cambiar su identidad, mudarse de ciudad, en tener un nombre diferente, en mudar a su familia".

Severo, quien ratificó que declarará en el juicio que se le sigue a dirigentes de la Unión Ferroviaria por la muerte del militante del Partido Obrero Mariano Ferreyra en octubre de 2010, desapareció a las 23.30 del miércoles.

Anoche fue hallado en la localidad de Gerli, con las manos atadas con precintos, descalzo y con signos de haber sido golpeado.