Ante un contexto de incertidumbre internacional, el gobierno busca que la crisis mundial no repercuta en la Argentina con una recesión, como sucedió en 2008-2009. Con el objetivo de asegurar un piso de 4% de crecimiento, planean usar los “nuevos instrumentos” como los recursos de la ANSES, el impulso a los microcréditos y las medidas de Moreno para restringir las importaciones.

Mientras tanto, para el corriente año se espera una tasa que ronde el 7 u 8 por ciento, números que confirman las altas tasas de crecimiento de los años del kirchnerismo. Los analistas esperan que esta cifra repercuta positivamente en los índices del 2012, ya que hay un componente de crecimiento que se “arrastra” de un año a otro.

Durante la jornada de hoy los mercados se mostraron favorables al resultado de las primarias. La bolsa porteña volvió a operar con un saldo positivo, y principalmente hubo una suba de los bonos PBI del 3,14 por ciento. Desde PUENTE Hermanos explicaron que este resultado se debe a que este gobierno ha mantenido un modelo de alto crecimiento sostenido y el pago de las deudas, con lo cual este nuevo triunfo de Cristina significa tranquilidad para los inversores. Además, la contundencia del triunfo ayuda a reducir la incertidumbre que se presenta en todo proceso eleccionario.

A eso se le suma la publicación en el próximo viernes del Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE), que ha mostrado altas tasas en los últimos meses (8,9% en el anterior) y es una confiable proyección de la evolución del PBI. Por otro lado, los analistas de PUENTE también hablaron de los efectos positivos que generó la tranquilidad registrada en los mercados mundiales, después de que la semana pasada se registraran altos niveles de volatilidad.

El rol de las exportaciones

Por otro lado, la suba en las commodities también influye favorablemente en las economías de carácter agroexportador, como la argentina, y eso repercute en la demanda de activos atados al PBI.
Los economistas consultados por La Politica Online también ven una recesión como muy poco probable pero sí esperan una desaceleración del crecimiento económico, explicada mayormente por la caída en el precio de las commodities y la fuga de capitales.

Según el informe del Banco Ciudad difundido la semana pasada, “un estancamiento de los commodities afecta las exportaciones, compuestas en más de 50% por productos agrícolas. Y continúa “otro dato clave es lo que pase con Brasil (nuestro principal cliente, responsable del 40% de las exportaciones industriales), sumándose como potenciales perjudicados el turismo y las exportaciones de servicios”.

Rodrigo Alvarez, gerente de Economía y Finanzas de Ecolatina, comenta que la proyección de crecimiento que manejan desde la consultora es de un 3,5%, y recalca la importancia que cumplen las exportaciones en la economía argentina. Para Alvarez, “las exportaciones están creciendo sólo por precio; cuesta mucho más que crezcan en volumen”. Por otro lado, afirma que “existen limitaciones en la oferta local, desde el punto de vista de competitividad, se ha acumulado inflación en dólares y la demanda externa no tiene el mismo dinamismo”.
“Si a eso se le suma un panorama en el que el mundo crece a tasas mucho más bajas y la demanda no tiene el mismo vigor” explica, “a nivel local vemos que el consumo, si bien es una de las variables que más crece, muestra una desaceleración, producto de la salida de capitales”.

Desde Ferreres & Asociados comentan que además de las exportaciones debe agregarse que “la capacidad ociosa es muy baja y existe muy poca capacidad energética”. “Por otra parte” continúa Fausto Spotorno, Director de Research de esta consultora, “hay que ver que la inflación no empiece a reducir el consumo”, y explica que por este fenómeno, que incentiva al gasto y no el ahorro, “hay menos inversiones. A la larga, la capacidad de crecimiento es menor; se castiga el crecimiento a largo plazo” concluye.