El “ministro del Interior” del grupo Techint, Luis Betnaza, sigue al frente de una inédita racha de torpezas y derrotas. Luego de embarcar al grupo de la familia Rocca en la insólita apuesta de la candidatura presidencial del radical Ernesto Sanz, ahora tampoco logra encontrar un candidato a presidente de la UIA potable, para proponer como alternativa a Ignacio de Mendiguren.
Fue el veto de Betnaza a la candidatura de De Mendiguren, que ya estaba acordada como sucesor de Héctor Méndez, la que sumergió a la UIA en una crisis de la que aún no logra salir. Como toda explicación, en el grupo Techint sostienen que De Mendiguern “dejo de ser confiable”. Esto es que no se alínea de manera prsuina con los dictados de Betnaza.
Habría molestado paticularmente en el grupo de la familia Rocca, las buenas migas que hizo con la Presidenta y funcionarios del Gobierno durante la reciente gira por Corea.
El problema es que los socios de Techint en la lista Industriales ya están empezando a perder la paciencia. Es que la última jugada de Betnaza fue proponer al ejecutivo de Arcor, Adrián Kaufmann Brea, pero en el resto de los empresarios no cayó bien que se proponga nada menos que para presidir a la UIA a un gerente de relaciones institucionales. “Tiene que ser un dueño, si quieren a alguine de Arcor pongan a Pagani”, fue una de las chicanas lanzadas.
Intimado a resolver la sucesión en un máximo de dos semanas, ahora Betnaza intenta reflotar la candidatura de Kaufman Brea y por las dudas también impulsa la candidatura del ex Alpargatas Guillermo Gotelli, en cuya casa se terminó de cerrar la renuncia del ex presidente Héctor Méndez.
El problema es que Gotelli es hoy un empresario menor del sector del calzado, que enfrenta enormes pasivos y sobrevive gracias a la ayuda de créditos y refinanciaciones oficiales. Es decir, en la UIA lo ven demasiado “cooptable” por el kirchnerismo, precisamente uno de los motivos que disparó la furia de Techint con De Mendiguren.
En ese marco de crisis, hace pocas horas se convocó de urgencia a una reunión del grupo Industriales para tratar de acordar posiciones. Allí se acordó esperar hasta inicios de la semana que viene cuando regresa Kaufmann Brea de un viaje, y tratar de sellar en ese próximo encuentro al sucesor.
Es que en Industriales estiman que si a mediados d ela semana que viene no logran consensuar un candidato potable, el otro sector interno d ela UIA nucleado en la lista Celeste y Blanca, terminará de perder la paciencia y volverá a la carga con la iniciativa de pedir elecciones directas, que lanzó en su momento el presidente de Aluar Javier Madanes Quintanilla. Y como se sabe, la mayoría de los socios de la UIA militan en la Celeste y Blanca.
Es por esto, que pese a que Celeste y Blanca aceptó respetar el acuerdo de sucesión, dejó en claro que el candidato a presidente que proponga Industriales deberá contar con su visto bueno. En ese marco, desde ese sector llegaron inesperados apoyos a favor de De Mendiguen, un hombre al que ven con una muñeca política más sutil que la de Betnaza, ideal para un año electoral.
“Nosotros apoyamos como candidato a Ignacio de Mendiguren, creemos que es el mejor para hacerse cargo de la responsabilidad de conducir la UIA en los próximos dos años, porque tiene la cintura suficiente para conciliar los diversos intereses de cada uno de los sectores fabriles y el Gobierno, sea el actual o el que lo suceda después de las elecciones", dijo a Infobae.com el textil Jorge Sorabilla, secretario de la UIA para La Rioja, Catamarca y San Juan.
Es que De Mendiguren, cuenta con el respaldo de un sector grueso de las Pymes, de las empresas del interior del país y de algunos grupos grandes hartos de la cruzada de Techint contra el kirchnerismo.