“Las empresas que no tengan espalda para aguantar dos o tres meses, que no construyan para Santa Cruz”.

Cuando el gobernador Daniel Peralta pronunció esta frase en pleno conflicto con el sector de la producción, hizo hervir un punto clave de la política santacruceña. Se estaba metiendo no sólo con un gremio que posee cerca de 5 mil empleados en la provincia, sino también con el bolsillo de Lázaro Báez, el zar de la obra pública apadrinado por ex presidente Néstor Kirchner.

El conflicto por el atraso en los pagos de las certificaciones de obra derivó en un caos, que se tradujo que un corte total de la ruta nacional Nº3 que mantuvo durante seis horas inaccesible a la ciudad de Río Gallegos por vía terrestre. Obreros de las empresas Austral Construcciones, Gotti y Loscalzo del Curto –las tres compañías propiedad del empresario K Lázaro- reclamaban el pago de la primera quincena de enero.

Al ver que el asunto se le había ido de las manos, Peralta tuvo que intervenir en forma directa. Se comunicó con el delegado de Uocra, Carlos García, quien contó lo acordado: “Tuve un llamado del gobernador y me indicó que se están haciendo las gestiones para que el pago de la quincena sea hoy. Los compañeros del interior recibirán sus haberes el lunes".

"Durante la semana próxima –continuó- existirá un encuentro, para realizar una mesa de concertación para la obra pública y así firmar un acuerdo para que el trabajador tenga una estabilidad laboral de 90 días”. Fin parcial del conflicto. Un conflicto que tiene larga data y una historia oculta de negocios y críticas en el corazón de la sociedad patagónica, por una deuda calculada en 300 millones de pesos.

Con los K, no

En Santa Cruz –como en muchas provincias-, existe lo que se llama “certificaciones de obra”. Se trata de la verificación que hace el gobierno de la obra pública, que en Santa Cruz es lo mismo que decir Lázaro Báez.

Imperio de Lázaro

Peralta intentó lidiar contra Lázaro Báez y todo su potencial. Austral Construcciones y Gotti, se sabía, son de su propiedad. Ahora, voceros de Santa Cruz confirmaron a este medio que la tercera en cuestión, Loscalzo del Curto, también.

“Hace tres años era una empresa chiquita, hasta que falleció uno de los socios. A los pocos días, aún con la muerte del hombre muy presente en la familia –fue en un accidente de tránsito-, gente de Lázaro se acercó a la esposa y le compró el porcentaje de la compañía. A los pocos días, adquirió el resto y pasó a integrar su pool de empresas”. Lo que se dice un verdadero imperio.

Cuando una empresa gana una licitación, recibe una primera certificación que no es otra cosa que una parte de la inversión acordada. A los pocos meses, una inspección oficial verifica que se hayan cumplido los plazos y las condiciones y, de ser así, emite un nuevo certificado de obra. Así hasta el final.

Con esto no cumplió Peralta y por eso criticó a las empresas que no puedan aguantar “dos o tres meses”. Con esto también, el mandatario enfureció a Lázaro Báez, que es lo mismo que decir que enojó a Kirchner.

Se ganó así una jugada de neto corte político: Los trabajadores, con sueldos atrasados, dejaron de quejarse a las autoridades de la empresa y empezaron a marchar directamente a Casa de Gobierno. Esas marchas fueron sumando gente, hasta lograr una movilización de 500 empleados apoyados por la nueva conducción de la UOCRA.

Interna provincial

Los trabajadores de Austral Construcciones –mayoría en lo cortes de hoy identificados por su atuendo color naranja- no cuentan con el agrado mayoritario de la capital sureña. Es que el año pasado, cuando los docentes llevaron a cabo una serie de medidas de fuerza contra el gobierno que mantuvo en crisis a Santa Cruz, estos –claramente reforzados por el vínculo entre Lázaro y Kirchner- eran los que encabezaban las “contra marchas” que el oficialismo intentaba hacer pasar como una reacción “espontánea”.

“Nos ponían gente en la puerta de la Casa de Gobierno” contó a La Política Online una fuente de la provincia, quien a su vez contó la visión de una de las víctimas de Daniel Varizat sobre la movilización: “Ojalá es paguen, pero ellos son lo que defendían al gobierno hace algunos meses”.