El kirchnerismo admite que Mauricio Macri inició una negociación para ampliar la Corte Suprema de Justicia a 7 miembros y abrir así dos vacantes más para negociar con el Frente para la Victoria.

Consultado por LPO, Héctor Recalde reveló que Miguel Pichetto le blanqueó las gestiones, durante una reunión que mantuvieron para comunicar un rechazo conjunto al aumento de la coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires decretado por Macri, que como adelantó LPO logró unir los endebles bloques del Frente para la Victoria. 

"Me dijo que se habla de eso", respondió el jefe de bloque de Diputados, en una conferencia del bloque FpV. "No me parece mal ampliar la Corte. Pero habría que hacer un debate amplio y abrirlo a la sociedad", completó.

Pichetto avanzó ayer en las tratativas para ampliar la Corte, una oferta que le acercó el Gobierno a través de Federico Pinedo y serviría para destrabar la negociación por los otros dos candidatos que Macri propuso por decreto para cubrir las vacantes actuales.

La idea de la ampliación inicialmente rechazada por la Casa Rosada, empezó a verse como una oportunidad cuando se dieron cuenta que con una Corte de siete podrían estar cerca de la mayoría. La idea de los "otros dos" jueces que se sumarían en una Corte de siete, sería uno para el PJ y otro para Macri y sus aliados. Así, contarían con Rozenkranz, el que sumen y la buena relación con Rosatti, cercano a Daniel "El Tano" Angelici, a quien lo une su pasión por Boca.

Pichetto había advertido en diciembre que rechazarían el pliego si el presidente insiste en hacerlos jurar por decreto. El FpV tiene quórum propio, o sea, Macri nunca alcanzará los dos tercios sin contentar a esa bancada.

La amenaza peronista y una reunión de Ricardo Lorenzetti motivaron a Macri a suspender la jura en diciembre, pero cerca del presidente aseguran que no se dio por vencido y quiere a Horacio Rosatti y Carlos Rosenkranz en la Corte antes de marzo.

Para desandar este entuerto en la Casa Rosada reflotaron la idea de ampliar la Corte a 7 y que al menos una de las nuevas vacantes sea para alguien del Frente para la Victoria.

A Pichetto le gusta la idea porque está interesado en ser juez de la Corte. Ya lo había negociado con Daniel Scioli y hasta había armado una comisión en la sombras con la senadora puntana Liliana Negre de Alonso y Ricardo Gil Lavedra para negociar las vacantes. En esas conversaciones ya se hablaba de una Corte más amplia.

De hecho, Adolfo Rodríguez Saá -jefe político de Negre de Alonso- trabaja un proyecto con otra de las opciones de ampliación del máxicmo tribunal: Llevarlo a nueve miembros y dividirlo en dos salas.

Como sea, el problema del rionegrino es que no es el único interesado en autopostularse para la Corte. Además de la puntana Negre de Alonso, el senador Rodolfo Urtubey, hermano del gobernador salteño, también se propone para completar el Tribunal en caso de ampliarse. 

Por lo pronto, los tiempos corren. El ministro de Justicia Germán Garavano tiene tiempo hasta fin de mes para enviar los pliegos de Rosatti y Rosankranz al Senado y empezar a negociar con el PJ.