Daniel Scioli aprovechó la inauguración formal de las nuevas instalaciones de la editorial Perfil en el barrio de Barracas, para marcar una diferencia fuerte con las políticas de enfrentamiento total que el kirchnerismo instrumentó todos estos años con la prensa independiente.

Scioli no dudó en aprovechar el momento para enviar señales al electorado independiente y peronista no kirchnerista, que necesita de manera urgente para alcanzar los 40 puntos, que según todos los últimos sondeos no tiene garantizados.

Jorge Fontevecchia, el CEO de editorial Perfil, llevó hasta la Corte Suprema y consiguió un fallo favorable –que el Gobierno incumple- su pelea por la discriminación publicitaria que le aplica el Gobierno, que destina los miles de millones de la pauta oficial a los medios paraestatales sin audiencia, que alimentó todos estos años con el presupuesto público.

Con una línea editorial marcadamente crítica, Fontevecchia nunca resignó el ejercicio periodístico de sus medios, pese al ahogo económico que Néstor y Cristina Kirchner le aplicaron, igual que al resto de los medios independientes.

Esto provocó que el kirchnerismo lo ubicara en el bando de las “corporaciones” anti peronistas, junto a diarios como La Nación y Clarín.

Este viernes por la noche, al mostrarse con Macri, Ricardo Lorenzetti y con Alberto -fundador del grupo- y Jorge Fontevecchia, Scioli marcó acaso la línea de diferenciación política más pronunciada de toda su campaña.

De hecho, los contactos de Scioli con Fontevecchia no son nuevos y ambos hablaron de la intención del CEO de Perfil de tener dos señales de televisión digital -los canales Perfil y Caras-, que en una decisión muy arbitraria, Cristina le negó semanas atrás. Si el gobernador gana las elecciones esta negativa podría modificarse.

En definitiva se trata de un giro del candidato oficialista anticipado por LPO como el dato central de estas elecciones, que marcan el final del experimento chavista que Cristina quiso aplicar en la Argentina.