La provincia de Neuquén había anunciado una gira en la segunda mitad de septiembre para la colocación de bonos en el exterior a cargo del actual ministro de economía y gobernador electo Omar Gutiérrez. Esta emisión estaba autorizada por la legislatura neuquina por una suma de hasta 350 millones de dólares respaldados por regalías petroleras. 

Hoy luego del golpazo que significó la resolución de ayer de la CNV que forzó a los fondos de inversión a poner a valor de tipo de cambio oficial el valor de sus bonos argentinos, en el mercado se comentó que Neuquén decidió posponer su colocación. 

El objetivo inicial de la provincia era obtener una tasa de interés de un dígito por estos bonos a 8 años bajo ley de Nueva York. La caída de los precios de los bonos de referencia, BonarX y Bonar 24, dejó a la tasa de interés por arriba de los dos dígitos en dólares y había obligado a suspender la emisión, según informa un operador.

Sería una respuesta cautelosa frente al desplome de la bolsa argentina causado por la incertidumbre introducida por el anuncio de la resolución 646 de la CNV. La baja de los activos brasileños ya era una posible causa de turbulencias. La caída de la bolsa acumulada entre ayer y hoy no solo dejaría momentáneamente a la provincia sin esta fuente de financiamiento, sino que le quitaría al BCRA el refuerzo de reservas que implicaba colocar esa partida de títulos en el extranjero.

Para esta operación, diseñada por Gutiérrez y el presidente del banco de Neuquén, Marcos Koopmann, se había resuelto contratar al JP Morgan y al Deutsche Bank. Los bonos iban a estar garantizados por las reservas petrolíferas de la provincia.