Marcelo Ramal recibe a LPO en su despacho de la legislatura porteña. En su escritorio se acumulan recortes y dos libros apilados: “Historia del Pueblo Argentino” de Milcíades Peña, y los cuentos completos de Jorge Luis Borges.

El diputado del Frente de Izquierda(FIT) sumará a partir de diciembre un miembro más a su bloque y hace un balance de los resultados obtenidos hasta ahora por esa fuerza.

Economista y docente de la UBA, Ramal advierte que la deuda llega al 50% del PBI y propone “recapitalizar” al Banco Central y la Anses. Además, asegura que los planes de Scioli, Macri y Massa consisten en “devaluar y subir tarifas”.

¿Cómo quedó el bloque del FITen la Legislatura porteña tras el resultado de las últimas elecciones?

Vamos a ser dos legisladores. Yo fui electo la primera vez en el 2013. Tenemos un acuerdo de rotación de bancas por el cual dejo la banca conquistada en diciembre y asume Patricio Del Corro, del PTS, que es quien seguía en la lista. Al haber sido electo asumo la nueva banca en la cual nuevamente voy a estar dos años. de todos modos, con esta reelección se cuenta para mí como única posible como cualquier otro diputado. La constitución de la ciudad solo admite una sola reelección, con lo cual no tengo posibilidad de volver a presentarme. Salvo en una posterior. Podría en el 2019 pero no en el 2017.

Vamos a ser dos legisladores. Estamos contentos no sólo por ese resultado sino porque inclusive terminamos holgadamente el mínimo para una banca y nos faltó poco para conseguir otro legislador más.

LPOJuan Casas

¿Qué proyectos van a impulsar?

Lo primero es ahora empujar con más fuerza los proyectos que ya tenemos en curso. Tenemos una agenda muy amplia en el tema salud, tenemos una iniciativa para establecer una jornada laboral reducida de 6 horas, por insalubridad, en el campo de la enfermería, que se empezó a debatir ahora en la comisión de salud. Es un proyecto que generó mucha movilización en los hospitales, acá hubo asambleas, e incluso ganamos una consulta hecha por redes sociales que organizó la propia Legislatura, fue el proyecto más votado.

En educación estamos trabajando dos iniciativas, que es la de declarar la emergencia edilicia, ante la situación que atraviesan muchos establecimientos en la Ciudad por fallas de mantenimiento, fallas de infraestructura, los recortes presupuestarios de Macri en este plano. Y luego suspender la aplicación de la reforma de la escuela secundaria, que está siendo fuertemente resistida en los colegios por todas las dificultades que trae en materia no sólo coyunturales sino la necesidad de adaptar las escuelas a las nuevas currículas sino fundamentalmente una desvalorización de la oferta curricular en la enseñanza media en la Ciudad.

En tema vivienda tenemos iniciativas que tienen que ver con replantear el uso de las tierras de la Ciudad, sobre todo en el sur y en el sudoeste, teniendo en cuenta las necesidades de vivienda social, de espacios verdes de carácter público, y una política de privatización del suelo en toda esa zona. También estamos dando una batalla en temas de violencia de género. Presentamos dos proyectos, uno sobre la creación de centros integrales de atención a la mujer en todas las comunas, que se está debatiendo en la comisión de mujer de la Legislatura. Y otra con la posibilidad de ofrecer licencia a la mujer que denuncia caso de violencia de género para que pueda reordenar su vida, que pueda pedir licencia en relación a lo que le pasa, y no como ahora que tiene que pedir una licencia que después es reportada como licencia psiquiátrica.

Como no existe una figura por violencia de género, se da la situación de que después ese pedido de licencia psiquiátrica fue utilizado contra ellas por la disputa por la tenencia de los hijos. Tenemos una agenda bastante amplia. Por supuesto también tenemos que discutir nuevos proyectos.

LPOJuan Casas

¿Crees que va a volver a haber un pacto entre el PRO y el kirchnerismo?

No descarto para nada la tendencia al acuerdo entre lo que hoy se llama ECO, el kirchnerismo y el PRO, porque los intereses que defienden en la Ciudad son los mismos: las corporaciones inmobiliarias, financieras, comerciales que operan en la capital y han acompañado a los gobiernos que hoy están en ECO o el kirchnerismo o del macrismo. Si uno analiza ese paquete de pactos han tenido un eje. Probablemente el más importante haya sido la enajenación de tierras públicas. no me sorprendería para nada.

¿Cómo es el mecanismo de esa enajenación?

Por ejemplo, se rezonifica un área de la Ciudad. Una tierra pública tiene un uso que no es adecuado para el desarrollo inmobiliario, por ejemplo ferroviario, parque, urbanización futura. Son los códigos que se utilizan en el código de planeamiento urbano para identificar áreas que todavía no pueden ser usadas para un proyecto inmobiliario.

Lo que se hace en este tipo de acuerdos es la rezonificación. Se le da un uso para actividad comercial o inmobiliario a un terreno que antes no lo tenía. Eso genera una renta económica fabulosa desde el punto de vista del suelo. Un metro cuadrado que antes tenía un valor acotado, tocado por la varita mágica de la legislatura pasa a tener un valor hasta diez veces mayor.

Hay acuerdos cruzados, que también tienen que ver con intereses económicos cruzados. Está pendiente la rezonificación de la isla De Marchi, para llevar adelante el polo audiovisual que anunció Cristina y en rigor va a ser una megatorre con poco de audiovisual. Muy cerca de allí, junto a la reserva ecológica está el proyecto santa maria del buen aire, que prevé construir trece megatorres en toda la zona de costanera Sur. Ese proyecto lo fogonea el macrismo, el polo audiovisual por el kirchnerismo, ahí está planteado un intercambio de favores para habilitarse recíprocamente los dos proyectos. Todavía no llegó a la Legislatura.

¿Cuáles son los empresarios que se benefician con estas maniobras?

Está Irsa. Hay que ver si en el polo audiovisual va a estar Constantini. Eso todavía está abierto.

¿Y cómo ve los resultados hasta ahora de la izquierda a nivel nacional?

Hasta ahora han sido auspiciosos. Más allá de los altibajos-hay lugares donde nos fue un poco mejor y en otros un poco peor-, el Frente de Izquierda consolidó una votación. Consolidó un lugar. Si analizas Mendoza, Salta, Neuquén, la propia Ciudad de Buenos Aires, Santa Fe, detrás de los tres grandes bloques viene el frente de izquierda. Esto nos permitió o bien renovar lugares en las legislaturas o conquistar nuevos.

El balance de esas elecciones es que el Frente de Izquierda se consolidó.

¿Esperan que crezca el bloque del FIT en el Congreso Nacional?

Esperamos incorporar diputados. Las mayores expectativas están en la Provincia de Buenos Aires y en Córdoba. Pero también en la capital. Todo esto va a depender un poco de cómo se vaya configurando el panorama electoral a nivel nacional.

¿Cómo analizas la situación económica actual?

LPOJuan Casas

Es indudable que lo que está ocurriendo en estos días de alguna manera interpela al proceso económico de si el gobierno va a tener o no la transición ordenada que esperaba tener. Hay una clara disparada del dólar blue en un cuadro que tiene dos componentes. Por un lado hay una lucha de camarillas empresariales, judiciales que se expresa en esta cuestión del valor del dólar. Pero al mismo tiempo la clase capitalista, considerada en su conjunto, está empujando por una devaluación, que de alguna manera ya se está configurando y ahora y es una pieza maestra del ajuste que en cierto modo comparten Macri, Massa y Scioli, que buscan promover un proceso de afluencia de capitales sobre la base de desvalorizar el salario, los gastos sociales y las jubilaciones. Y los activos nacionales.

Las dos vigas maestras del programa económico que más o menos están proponiendo los candidatos es una devaluación de la moneda y un aumento drástico de tarifas, con las diferencias de que lo pondrán en marcha de forma gradual o drástica. Es el viejo expediente de transferirle a los trabajadores la carga de una crisis. De todas maneras ese ajuste ya se está configurando con lo que está ocurriendo hoy: el aumento del blue, la inflación, la caída del poder adquisitivo del salario, y la preservación de otras cuestiones que han sido pilares del “modelo”: La mitad de los trabajadores ganando menos de 6000 pesos, 27% de pobreza.

¿Ante ese escenario, cuál es el programa económico del FIT?

Nuestro planteo económico parte de ordenar las prioridades nacionales en forma antagónica de como lo hacen los bloques dominantes. La economía tiene que organizarse a partir de asegurar el derecho al trabajo en primer lugar, y que ese trabajo asegure un salario que cubra la canasta familiar. Un plan de industrialización nacional que sea debatido por el conjunto de los trabajadores. Un completo replanteo en cuanto a la deuda pública y la deuda externa, que se ha convertido en una carga insoportable ya no sólo para la Argentina sino después de lo que se vivió en Grecia constituye una hipoteca que la mayoría de los pueblos del mundo no pueden cargar sobre sus espaldas.

¿Más allá de que la proporción sobre el PBI se haya reducido?

Ese es un argumento discutible. La visión de que bajó respecto del PBI sólo admite como deuda pública la que se ha contraído con acreedores privados del exterior, pero no considera la deuda que ha contraído el estado con el Banco Central, por un lado, y con la Anses, por el otro. Si esas deudas no se toman en cuenta, uno tiene la seria presunción de que otra de las funciones de la devaluación de la moneda es pulverizar el valor de la deuda en pesos. Pero eso significa el completo envilecimiento de la moneda nacional, con su correlato en la inflación y de caída en el poder adquisitivo de los trabajadores, y en el caso de la Anses del propio fondo de Garantía, que tiene muchos fondos en pesos y sufriría una fuerte desvalorización.

LPOJuan Casas

Cuando se considera todo ese paquete la deuda orilla el 50% del producto Bruto y por lo tanto es notable que se está reclamando un proceso de reendeudamiento del país a un estado que ya está fuertemente endeudado y potencialmente quebrado porque hay déficit fiscal y patrimonio neto negativo. Esto de alguna manera, volvemos al mismo punto, las medidas devaluatorias serían una tentativa de salir de estos desequilibrios económicos en base a un ataque fuerte a las condiciones salariales.

Probablemente sea un planteo que carezca de toda perspectiva, porque la pretensión de atraer capitales choca con una tendencia a la retracción de esos capitales en el marco de un desinfle de las economías emergentes, de un estallido de la burbuja especulativa en China, y un panorama político convulsivo a partir de las fuertes reacciones que se ven en Europa a partir del pago de la deuda.

¿A eso se suma la suba de tasas anunciada por la FED?

La suba de tasas de interés se incorpora a esta tendencia a la tendencia contractiva de los capitales, que llevaría a una suerte de reflujo. Al carácter reaccionario de las medidas que se están planteando habría que incorporarles su inviabilidad, su falta de horizonte, teniendo en cuenta toda la crisis internacional.

Hay que hacer otro planteo. Partir de las reivindicaciones urgentes, asegurar el derecho al trabajo que podría estar asegurado sobre la base de un plan de industrialización. Terminar con la sangría del ahorro nacional para el pago de la deuda y volcarlo a un relanzamiento económico sobre bases sociales diferentes, que recupere las posibilidades de industrialización, el transporte público, la cuestión energética.

La Argentina tiene un ahorro nacional de unos 100 mil millones de dólares por año que hoy por el pago de la deuda y la fuga de capitales se expulsa. Una planificación económica guiada por un gobierno responsable por los trabajadores, que sería nuestra visión de un gobierno de izquierda, tendría que replantear esto.

¿Y eso ayudaría a solucionar el déficit o saldar la deuda con la Anses?

La Anses y el Banco Central deberían ser recapitalizados teniendo en cuenta quiénes se han beneficiado fuertemente con el proceso especulativo del retiro de sus recursos. El uso de reservas para pagar deuda obligó al propio Banco Central a ser vehículo de un mecanismo de endeudamiento con bancos privados, y a esos bancos privados, asegurarles rentas financieras enormes. Lo mismo ocurre con la Anses, que ha actuado como financista en este esquema de pago de deuda. Por eso los dos deberían ser recapitalizados a costa del capital financiero.