Esteban Echeverria
Un caso testigo del juego a dos puntas de los candidatos massistas
Los vínculos con el PRO y Gustavo Posse. Acuerdos para la fiscalización y para el próximo Concejo.

Mientras Sergio Massa rivaliza con Mauricio Macri por liderar la oposición al Gobierno de cara a las primarias de agosto, sus candidatos en el Conurbano ya empiezan a negociar con el PRO acuerdos de “colaboración” en los distritos.

El escenario se complejizó tras la salida de Darío Giustozzi del FR. El ex intendente de Almirante Brown tiene varios dirigentes en la tercera sección que se disponían a encabezar las listas locales de Massa, lo que dejó al tigrense en una seria encrucijada.

Massa duda de la confianza de algunos de ellos pero a su vez no está en condiciones de seguir depurando su espacio, por riesgos de que se transforme en una verdadera sangría.

Además, en las primeras líneas del massismo y el PRO también hay diálogo, por lo que es un movimiento que ciertamente se está dando y en los próximos días, no más de 15, tendrá resultados, nulos o gravitantes.

El caso testigo, al que accedió LPO, es el de Esteban Echeverría, pero bien vale para varios distritos del Conurbano.

En las tierras de Fernando Gray, el candidato de Massa que encabezó la lista en 2013 fue Néstor Pulichino, hombre de Giustozzi. Superó a la mujer del intendente, Magdalena Goris, y viene trabajando para ser candidato en agosto.

Los gestos de campaña de Pulichino, sin embargo, dan cuenta de que ya empieza a ensayar un juego a dos puntos con el hombre de Macri, Ever Van Tooren, impulsado también por los referentes del PRO en tierras bonaerenses.

Dato clave: el concejal Pulichino no asistió el sábado al plenario que encabezó Francisco De Narváez en Mar del Plata, aún cuando sabía que lo de Giustozzi era inminente, y cuando otros referentes del hombre de Brown sí lo hicieron. 

No obstante, la noche anterior, viernes, Pulichino convocó a un encuentro en su local de la calle Mariano Acosta, en pleno centro de Monte Grande. Allí bajó línea a su militancia, para avisar que pese a la crisis de Giustozzi (rompería dos días después) él seguiría como candidato de Massa.

En primera fila estaba Pablo Losada, alfil de Gustavo Posse, afuera del massismo y con vínculos en el radicalismo PRO. Como jefe de campaña de Pulichino, estaba Facundo Prieto, ex presidente del macrismo en el distrito, aún con vasos comunicantes que le permiten operar en la obra pública en Vicente López y San Isidro.

Prieto fue además secretario de bloque de Van Tooren, en su mandato de concejal, y ahora fue designado jefe de campaña de Pulichino. Otro dato: la actual secretaria de bloque del massismo es la esposa de Prieto, Melina Baio. Y el prosecretario del Concejo es su madre. Garantías del posible acuerdo.

Cuando Posse rompió con Massa, Losada (que presidía el bloque massista) dio un paso al costado y dejó a Pulichino como presidente de bloque, en una maniobra irregular que un sector del massismo denunció ante LPO.

Este otro sector del massismo lo encabeza Roberto Devoto, hombre de Graciela Camaño, aliada en esta guerra con Francisco De Narváez.

Por lo que Devoto quedó ahora como un “massista puro”, mientras Pulichino es uno de los que más mide, de vasta experiencia, pero con gestos hacia el PRO. Massa tiene también a otro giustozzista, Fernando Sousa, que responde a Sebastián Galmarini y decidió quedarse en el FR. Sousa fue de hecho el primer concejal de Massa en la tercera seccion, allá por marzo de 2012, y gozaba también de buenos números al menos en la elección de 2013.

La relación entre Pulichino y los hombres del PRO Losada y Van Tooren sigue latente, y como se comentó en las líneas anteriores ya se concretó en el Concejo Deliberante. Si avanzan en un acuerdo para las elecciones, tienen grandes chances si no ganar el distrito al menos controlar el próximo cuerpo legislativo.

De cara a las elecciones, es una jugada nada extraña en el Conurbano. Cada uno jugaría por su espacio y el que mejor llegue después de las primarias recibiría la “colaboración” del otro para las generales de octubre. Un pacto de “no agresión” que en los hechos son arreglos en la fiscalización para cuidar los votos de uno y otro.

LPO habló con Walter Martello, ex presidente de la Coalición Cívica bonaerense, actual massista y oriundo del distrito. Martello confirmó los rumores de acuerdos subterráneos con el PRO y expresó su malestar porque "debilitan y dividen”.

“Nosotros vamos a articular con el candidato que confronte a Gray, esa es nuestra primera premisa. Lo segundo es que haya una vocación por acompañar a Massa. El acompañamiento al proyecto presidencial es fundamental. Esto de reunirnos con el PRO lo que hace es alentar fantasmas en un momento delicado para nuestra fuerza”, señaló.

“Porque para no cambiar nada y repartirnos un espacio de poder en el Concejo, no tiene sentido. Después veremos si es Devoto o Pulichino el que vaya mejor con estas premisas”, completó.

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