Sergio Massa fue el único presidenciable en capitalizar la caída del pliego de Roberto Carlés como juez de la Corte Suprema de Justicia, con una conferencia el Senado para entregar las más de un millón de firmas en rechazo al nuevo Código Penal, reunidas por la militancia del Frente Renovador.

La escena fue a pedir del tigrense, que reunió a referentes de toda la oposición a excepción del PRO.

Estuvieron los radicales Gerardo Morales y Eugenio “Nito” Artaza y la cobista Laura Montero; Adolfo Rodríguez Saá, Liliana Negre de Alonso, Graciela Di Perna, Roberto Basualdo y Guillermo Pereyra (Interbloque peronismo federal); y Fernando “Pino” Solanas, del Frente Amplio Progresista.

Pino ya había coqueteado con Massa antes del cierre de listas de la Ciudad. Aunque no hubo acuerdo su legislador, Javier Gentilini, se convirtió en el primer escaño massista de la Legislatura porteña.

Por su cercanía a Eugenio Zaffaroni, Carlés fue el coordinador de la comisión que redactó por dos años el nuevo Código Penal. El proyecto nunca llegó al Congreso, porque cuando el año pasado circuló el primer borrador, Massa denunció que le restaba penas a los delincuentes y salí a juntar firmas por todo el país.

Con el pliego de Carlés congelado, Massa puso las carpetas sobre el salón azul del Senado con 1.250.000 firmas. “Muchos quieren terminar con una justicia militante, para tener una justicia independiente”, abrió su discurso el tigrense, ante una audiencia con mayoría de legisladores de la provincia de Buenos Aires. También se hicieron ver algunos diputados nacionales como Graciela Camaño y Mario Das Neves.  

“El Código Penal fracasó porque entiende que los jueces deben comprender la actitud de los delincuentes. Les recomiendo a los que piensan eso que en lugar de estudiar derecho, estudien psicología”, ironizó, en clara referencia a Zaffaroni y Carlés.

“Ni mañana ni nunca van a imponer en la Corte lo que no impusieron en la ley”, cerró Massa. Intentó comprometer a los senadores a no rever su posición.

Adolfo Rodríguez Saá había negado haber negociado el voto de su interbloque no había pensado en apoyar a Carlés, pese a las negociaciones que mantuvo con la Casa Rosada.

“El Interbloque Federal reclamará el tratamiento del pliego en sesión”, ratificó y alertó sobre la idea del FpV de “preparar una emboscada y conseguir la aprobación entre gallos y medianoche”.

Morales admitió que la UCR no tiene posición sobre el ante proyecto del Código Penal, que tuvo entre sus redactores al radical Ricardo Gil Lavedra.

Y ponderó la junta de firmas. “Será tomada como antecedente para cuando se trate el pliego en el recinto ya que mañana la sesión no se realizaría”, destacó.