Casi al mismo tiempo que Cristina Kirchner ingresaba al Congreso para brindar su discurso ante la Asamblea Legislativa, el vicepresidente Amado Boudou era abucheado en Montevideo en la ceremonia de traspaso de mando entre Tabaré Vázquez y José “Pepe” Mujica. 

Hubo tres fuertes reprobaciones de los uruguayos durante la ceremonia. El ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro (que mantiene un duro enfrentamiento con organismos de Derechos Humanos); el rey emérito de España, Juan Carlos de Borbon; y el vicepresidente argentino. Periodistas e invitados apostados en la plaza Independencia de la capital uruguaya aseguraban que Cristina Kirchner envió a su vice para evitar la incómoda foto en la Asamblea Legislativa. 

A Boudou se lo vio sonriente y distendido, hasta que subió al escenario para saludar a Tabaré. Durante la ceremonia, el vice se sentó junto a su par de Venezuela, Jorge Arreaza, y detrás del presidente de Ecuador, Rafael Correa. Boudou recibió en las últimas horas un nuevo revés judicial en la justicia federal. 

La Cámara de Casación Penal rechazó un recurso de queja con el cual los abogados del vicepresidente pretendían declarar la nulidad del requerimiento de elevación a juicio oral del caso del auto con papeles truchos. 

Este mes, el vicepresidente se quedó sin el equipo de abogados que lo defendía. El estudio jurídico Richarte anunció que dejaría de trabajar con todos los funcionarios del Gobierno que hasta ese momento tenía en su cartera.