El Frente Renovador festejó ayer en Pinamar el segundo aniversario de la conformación de esa fuerza política que logró derrotar al kirchenrismo en las elecciones de 2013. Unos 100 legisladores e intendentes que conforman ese armado llegaron hasta el balneario CR, búnker informal de Sergio Massa durante el verano.

Allí, Massa les pidió que se aparten de la polémica con el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, que amenaza con dar el portazo del Frente Renovador para volver a la filas de Mauricio Macri y ser el candidato a gobernador del PRO.

Por eso, intendentes y legisladores vienen evitando referirse al tema. Por ahora los massistas no muestran posicionamientos internos como sí manifestaron respecto de la llegada de Martín Insaurralde. "Esto es un tema que tengo que resolver yo", les dijo Massa a sus referentes durante la reunión de ayer.

Su discípulos obedecen. "Si me llamás por lo de Posse, te pido disculpas pero no voy a hablar", decían hoy desde el Frente Renovador ante algunas consultas de este medio. En otras entrevistas de TV o radio, ante la pregunta, dieron una respuesta general, esquiva. Hoy Mónica López fue entrevistada por el canal QM Noticias desde Pinamar y sólo se limitó a decir que no comparte los dichos de Posse porque trabaja para la candidatura de Massa.

La encargada de convocar y organizar el encuentro fue Mónica López. Por motivos obvios, el intendente de San Isidro no estuvo en el balneario de Pinamar. Tampoco estuvo Francisco De Narváez. "En ese momento tenía una entrevista", lo excusaron.

Hubo una mesa principal donde estuvieron aquellos que hace dos años participaron de la reunión fundadora. Y unos 100 dirigentes que se sumaron.

Según reconstruyen varias fuentes, el encuentro fue informal y tuvo a Massa como principal orador. El diputado habló del crecimiento del espacio y de trabajar para cumplir con los objetivos que el Frente Renovador pregona.