El arribo de fuerzas federales a Rosario para la pacificación de una ciudad jaqueada por la inseguridad parece haberle dado oxígeno a la gestión de Mónica Fein, quien ahora confía en revertir la imagen negativa que proyectan las últimas encuestas.

Si bien la intendenta fue cautelosa a la hora de hablar de postulaciones, en conversación con un programa radial deslizó sus intenciones de volver a presentarse a un nuevo mandato. “Lo mejor que me pasó en mi vida pública es ser intendenta de esta ciudad” sostuvo.

Es que la llegada de Gendarmería y Prefectura para custodiar los barrios más calientes de Rosario no solo morigeró la zozobra de los vecinos frente a los hechos de inseguridad sino que también oxigenó al gobierno municipal, lo que le permitió a la mandataria hacer declaraciones que dos meses atrás hubiesen causado profundo rechazo.

La “buena sintonía” con Nación y la cooperación entre los tres niveles del Estado también tuvo su instantánea el pasado domingo durante los festejos del 25 de mayo que se realizaron en el populoso barrio Las Flores, otrora territorio controlado por la banda narco Los Monos.

Apenas la banda de Gendarmería comenzó a interpretar los primeros acordes del conocido chamamé Kilómetro 11, Sergio Berni (que pasó el fin de semana en Rosario) sacó a bailar a Fein.

La interna socialista a flor de piel

La intención de Fein de postularse para la reelección generó expectativas en el sector que lidera el senador Rubén Giustiniani, diferenciado de la actual gestión. Ese sector ve la posibilidad de absorber el electorado crítico a Fein pero que se sigue identificando con el Frente Progresista.

“Vamos a presentar candidatos para todas las categorías”, había adelantado a este medio Giustiniani y hoy lo volvieron a ratificar allegados al presidente del Concejo Municipal, Miguel Zamarini.

“Estamos trabajando junto a un importante sector del radicalismo”, confió a LPO una fuente cercana a Zamarini. “La idea es poder consensuar una lista de unidad que compita en las internas”, agregó.

Desde la UCR también manifestaron la voluntad de competir en las internas y dejar de ser el “vagón de cola” del Socialismo. Presentando un mosaico menos compacto, el radicalismo cuenta con sectores afines a Zamarini y otros espacios más proclives a jugar en la interna del Frente con lista propia.

Las expectativas de Cappiello

Quien dio por concluido sus anhelos de una posible candidatura luego del anuncio de Fein fue el médico Miguel Ángel Cappiello, quien en las elecciones pasadas fue obligado a dejar el Ministerio de Salud de la provincia para hacer de punta de lanza del oficialismo.

En su momento, Cappiello manifestó su disconformidad con la decisión del partido de “bajarlo” al Concejo. Sin embargo, guardaba cierta expectativa de pelear por la intendencia en un futuro.

Con las declaraciones de Mónica Fein, ambos afines al binnerismo, Cappiello confirmó a LPO que echará por tierra sus expectativas. “No voy a ir a ninguna interna, mucho menos con Mónica Fein”, sostuvo el ahora concejal y aclaró: “Tengo una relación de hace muchos años cuando trabajamos juntos en Salud”.

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