El gobierno no pagará el cupón de PBI y se ahorra u$s 3500 millones
Kicillof anunció una sorpresiva reveluación del crecimiento estimado para el 2013 que pasó del 5% al 3%.

Finalmente se resolvió el misterio que tenía en vilo a los tenedores de deuda Argentina. El ministro de Economía Axel Kicillof informó esta tarde que en el 2013 la economía creció un 3%, por debajo del 3,22% necesario para que se gatille el pago del cupón de PBI. "Es un muy buen desempeño de la economía argentina en un contexto internacional adverso", aseguró el titular del Palacio de Hacienda.  "Casi seis veces más" que Alemania, comparó.

Pero el dato más relevante es que de esta manera el gobierno se evitará pagar más de U$S3.000 millones correspondientes al papel atado al crecimiento.

La incertidumbre sobre el pago o no del cupón había generado todo tipo de especulaciones en los operadores, ya que el último dato sobre el crecimiento de la Argentina había mostrado una suba del 4,9% para todo el año pasado. Sin embargo, en el ministerio de Economía ya habían adelantado que el número final(que determina si se gatilla o no) se haría con un nuevo cálculo del crecimiento auditado por el FMI, lo cual despertó las sospechas de los tenedores.

Los índices sobre la actividad económica del 2013 habían despertado mucha desconfianza entre los analistas cuando el Indec mostró cifras demasiado optimistas que llegaron a ser del 8% mensual, comparadas al mismo período del 2012, lo cual representaba un regreso a las "tasas chinas".

La economía se sigue desacelerando                                                                      En enero el Estimador Mensual de Actividad Económica mostró un aumento del 1,2% frente al mismo mes del año pasado y una caída del 0,4% respecto a diciembre, informó Kicillof.  

Esta situación motivó a un grupo de diputados opositores a difundir un cálculo alternativo del crecimiento, tal como venían haciendo con la inflación cuando el ex Secretario de Comercio Guillermo Moreno multó a un grupo de consultoras privadas. El martes, Patricia Bullrich y Federico Sturzenegger le facilitaron el camino al kirchnerismo. Los legisladores macristas estimaron que la economía se había expandido sólo un 2,9% en el 2013 y denunciaron que el pago del cupón vía falseamiento de las estadísticas consistiría un “delito”. Y advirtieron que podrían iniciar acciones legales.

Si bien la noticia de que el gobierno no pagaría el cupón PBI desplomó la cotización de esos activos en más de 30%, la decisión fue leída con buenos ojos por el mercado, porque vieron que Cristina está dispuesta a defender las reservas a toda costa y no va a desperdiciar unos U$S3.000 sólo por mostrar un crecimiento mayor, en un momento en donde el stock de divisas del Banco Central sigue goteando sin encontrar piso. En definitiva, el cupón de PBI es un tema secundario para la relación de la Argentina con los inversores externos.

Ya LPO había adelantado que en el sector financiero del exterior están viendo como positivo el hecho de que el gobierno haya tomado las riendas del ajuste y volvieron a entusiasmarse con el país, incluso antes del cambio de gobierno del 2015.

Lo cierto es que el giro de Cristina parece ser total. Justo esta mañana Kicillof anunció un recorte en los subsidios a las tarifas de agua y de gas junto al ministro de Planificación Federal Julio De Vido, que implicará subas en las boletas que pagan los usuarios de hasta 400%.

Este “sinceramiento” en las cifras de crecimiento se suman a las que viene aplicando Kicillof en el comercio exterior y la inflación, y forman parte del requisito que pusieron el FMI y el Club de París para que el país pueda volver a endeudarse en el exterior y así descomprimir los nubarrones del frente externo.

En febrero, el titular del Palacio de Hacienda dio a conocer el flamante Índice de Precios al Consumidor Nacional Urbano (IPCNu) que registró una inflación altísima del 3,7% mensual en enero, y del 3,4% en febrero, acumulando más del 7% en el bimestre.

Ahora bien, ¿qué sentido tenía pagar el costo de reconocer una inflación más alta mientras se malgastan reservas por un crecimiento falso? Más aún si el acuerdo con el Club de París exige un pago en dólares al contado.

La impresionante caída del 90% en el saldo comercial que viene registrando el Indec en lo que va del año va en el mismo sentido. El superávit prácticamente se evaporó porque Kicillof decidió blanquear los números que había truchado Moreno durante varios meses. De hecho, los economistas aseguran que la base de datos del ente estadístico contradicen el resultado positivo de U$S9.000 millones que mostró la balanza comercial en el 2013.

Además, el no pago del cupón no tiene “cross default” con la deuda externa. Es decir que si no se paga no se va a disparar ningún incumplimiento del país con acreedores internacionales. 

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
Noticias relacionadas

Cristina confirmó que se quiere ir de la mejor manera posible

Por Ignacio Fidanza
Las dos medidas de ajuste y sinceramiento anunciadas hoy: Recorte de subsidios y estimación a la baja del PBI lo confirman.
Para la oposición el producto creció 2,9% en 2013 y advirtió que pagar el cupón PBI sería “un delito”

Para la oposición el producto creció 2,9% en 2013 y advirtió que pagar el cupón PBI sería “un delito”

LPO
Es porque la cifra es inferior al 3,26% necesario para que se gatille el papel. El dato oficial se conocerá el jueves.
Kicillof blanquea la caída del superávit comercial: bajó un 92% en febrero

Kicillof blanquea la caída del superávit comercial: bajó un 92% en febrero

LPO
El ministro de Economía decidió blanquear los números del comercio, que también había manipulado Moreno.