En el bloque del PRO de la Legislatura porteña encendieron la alarma luego de la sesión del miércoles pasado, la primera del año, por el espíritu combativo que desplegaron las “muñecas bravas” de La Cámpora.

Pese a que Juan Cabandié ya no está en la Legislatura, La Cámpora tiene más representantes que en años anteriores.

Como anticipara LPO, el titular de La Cámpora, Andrés “Cuervo” Larroque, siempre cuestionó que Cabandié hacía una oposición funcional a Mauricio Macri: las votaciones del interbloque kirchnerista junto al PRO han llegado a complicar el armado camporista en los barrios más humildes.

De hecho, Cabandié pidió irse al Congreso porque el Cuervo buscaba intervenirle el bloque para cambiar esa realidad.

La intervención de Larroque no tardó en hacerse notar a través de las legisladoras que responden al Cuervo. Una de ellas es Paula Penacca, una joven de 30 años que fue séptima en la lista de candidatos a legisladores del Frente para la Victoria en los comicios de 2011 y reemplazó a Alejandro Amor, que fue elegido Defensor del Pueblo.

Penacca dio la sorpresa en la sesión del miércoles pasado, en la que la oposición intentó aprobar sin éxito una serie de proyectos contra la inscripción on line en las escuelas que implementó el gobierno de Macri y la falta de vacantes.

En medio de su discurso, Penacca resaltó su pertenencia a La Cámpora e incluso corrigió a la macrista Diana Martínez Barrios, que se había referido a una militante de la “orga”. Al mismo tiempo en el que usaba un tono de fuerte carácter para cuestionar al PRO, la legisladora miraba fijamente y de manera desafiante a los legisladores macristas.

Las palabras de Penacca calaron tan hondo en el PRO que en los palcos casi terminaron a las trompadas. El vicepresidente primero, Cristian Ritondo, debió interrumpir la sesión mientras hablaba la legisladora camporista, luego de que los militantes del PRO fueron amenazados por el secretario parlamentario del bloque kirchnerista.

"Estas diputadas no son Lubertino, los esperamos afuera", provocó el parlamentario kirchnerista, en relación a las legisladoras de La Cámpora que le aportaron al bloque K una impronta muy diferente a la que aportaba la ex titular del Inadi.

A la otra legisladora que hacía referencia el secretario parlamentario era Lorena Pokoik, que si bien proviene de la corriente Descamisados, es otra de las espadas con las que Larroque quiere manejar el bloque.

Pokoik, que ingresó a su banca en diciembre, también pidió la palabra en la sesión del miércoles, su primera sesión, y cargó con dureza contra las políticas educativas del PRO, que serán su blanco preferido durante su mandato.

Tanto ella como Penacca fueron designadas en la comisión de Educación, en donde se espera otro año caliente. El único proyecto legislativo que anunció Macri el viernes pasado en la apertura de las sesiones ordinarias, debe pasar justamente por esa comisión. Es el instituto de evaluación docente, que el PRO no pudo aprobar a fines del año pasado.

Penacca además estuvo cerca de quedarse con la comisión de Vivienda, uno de los temas más sensibles que atraviesa la gestión macrista, a tal punto que el PRO prefirió dejar esa comisión en manos de Unen.