El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, lanzó durísimas críticas contra los empresarios del transporte de larga distancia, a los que acusó de inventar el paro de 72 horas que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) realizará a partir del sábado.

"Basta de empresarios inescrupulosos que utilizan a los trabajadores para extorsionar al Estado con el objeto de obtener un subsidio. Basta, la Argentina no merece este tipo de empresarios", exclamó Capitanich en conferencia de prensa.

"Es típico del comportamiento de la conducta de los empresarios, en definitiva generan un conflicto sindical con el objeto de pedir subsidio al Gobierno, eso es lo que está detrás de este paro", manifestó el jefe de ministros.

Al respecto, el ministro coordinador agregó: "Nosotros hemos convocado para hoy a las empresas del sector, yo los he convocado para tener una reunión muy clara y vamos hablar con tanta claridad que vamos a establecer mecanismos de resolución de esta cuestión".

"Esto también va para los dirigentes sindicales, que critican al Gobierno y no a los empresarios que son los que aumentan los precios en forma indiscriminada. Entonces, los gremialistas están de acuerdo con los empresarios más que con sus propios trabajadores", agregó en lo que pareció una referencia a Antonio Caló, que ayer dijo que "a la gente no le alcanza para comer".

La Cámara de los Omnibus de Larga Distancia (CELADI) aseguró que el sector "no encuentra los mecanismos para poder acceder a un pedido cuyo costo supera los 104 millones de pesos mensuales entre el incremento de salario básico y viático". "Es decir, una cifra anual cercana a los 1300 millones de pesos. Situación que no hace más que acrecentar el déficit que viene arrastrando el sector", explicó la entidad en un comunicado.

El pasado 22 de enero, el secretario general de la UTA, Roberto Fernández, anunció la huelga para 1, 2 y 3 de febrero al no tener respuestas a las demandas salariales de los choferes.