Después del acuerdo que firmó la Cancillería argentina con el Reino Unido por Malvinas y el intento de acercamiento de Mauricio Macri con Theresa May, Londres responde al Gobierno con el lanzamiento de misiles desde las Islas.

En principio, el Gobierno se limitó a informar, a través del Servicio de Hidrografía Naval (SHN), que las tropas del Reino Unido lanzarán misiles desde las islas Malvinas, en ejercicios militares que se extenderán del 19 al 28 de octubre. Luego, llegó la fuerte protesta de la Cancillería.

"Las fuerzas militares inglesas que en forma ilegal ocupan el territorio argentino de las Islas Malvinas han notificado que realizarán un ejercicio de armas que incluye el lanzamiento de misiles", informó un radioaviso del SHN, dependiente del Ministerio de Defensa.

Se trata de un aviso destinado a dar seguridad a buques argentinos o de otras banderas. La nota aclara que "el área marítima donde se llevarán a cabo los ejercicios es parte del territorio argentino ilegítimamente ocupado por el Reino Unido". El SHN puntualizó además que "emite esta información en su carácter de autoridad de aplicación de compromisos internacionales vigentes con la Organización Marítima Internacional y la Organización Hidrográfica Internacional, así como por razones humanitarias de protección a la vida humana en el mar".

Después del aviso, la Cancillería emitió un comunicado en el que condenó la práctica militar. "La República Argentina rechaza la realización de estos ejercicios en territorio argentino ilegítimamente ocupado por el Reino Unido, los que desconocen las resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales, que instan a ambos países a reanudar las negociaciones a fin de encontrar una solución pacífica y definitiva a la disputa de soberanía, así como a abstenerse de realizar actos unilaterales en los territorios y espacios marítimos bajo disputa", sostiene la nota.

El vicecanciller Carlos Foradori entregó una nota al embajador del Reino Unido en Argentina, Mark Kent, "con una formal y enérgica protesta ante los mencionados ejercicios militares, exigiéndole que se abstenga de realizarlos, a la vez que pondrá en conocimiento de la situación al Secretario General de las Naciones Unidas", indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores.  

Los ejercicios del Reino Unido en el territorio argentino son habituales y habían generado duras críticas del anterior gobierno. Por caso, en abril de 2014, de Cristina Kirchner presentó una nota de "enérgica protesta" a Londres por ejercicios similares, que incluyeron lanzamiento de misiles. "Se repiten las provocaciones y actos hostiles hacia la Argentina de una potencia nuclear extracontinental", se indicó en aquel momento desde la Cancillería.

La anterior administración incluso reclamó en los foros internacionales ya que esas prácticas militares del Reino Unido violan resoluciones de las Naciones Unidas que piden abstenerse de realizar estos ejercicios sobre el territorio en disputa.

El episodio sucede después del escándalo que armó la canciller Susana Malcorra al firmar un acuerdo con el Reino Unido para avanzar en distintos temas, y en el cual no se mencionaba el reclamo de soberanía, una exigencia impuesta por Londres. El intento de volver a la política del paraguas fue ratificado por Mauricio Macri en la ONU donde hizo un tímido llamado a discutir la cuestión. 

Luego, el presidente dijo que la primera ministra británica había aceptado en una charla formal sentarse a dialogar e incluir el tema de la soberanía de las Islas, pero luego fue rápidamente desmentido por Malcorra, que no quiso poner en riesgo su candidatura para la ONU, que de todos modos terminó perdiendo.