En una decisión histórica y en medio de una ola de masacres en distintos puntos del país, la Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó este jueves que los norteamericanos tienen el derecho fundamental de portar armas de fuego en público en una decisión histórica.

El fallo 6-3 le da la razón a dos particulares, Brandon Koch y Robert Nash, adultos y residentes al norte del Estado de Nueva York que reclamaban su derecho a llevar armas sin requisitos de ningún tipo. Así, anula una ley de Nueva York que requería que una persona demostrara que tenía necesidades legítimas de defensa personal para recibir un permiso de armas y evitará que los estados restrinjan a las personas que portan armas.

Los primeros en salir a festejar la decisión del máximo tribunal fueron los miembros de la Asociación Nacional del Rifle (NRA). "El fallo de hoy es una victoria decisiva para los buenos hombres y mujeres de todo Estados Unidos y es el resultado de una lucha de décadas que ha liderado la NRA", dijo el vicepresidente ejecutivo de la NRA, Wayne LaPierre, en un comunicado.

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A la inversa, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, calificó la jornada como un "día negro", dado que evita que los Estados puedan legislar sobre leyes de armas por su cuenta. "Terrible, absolutamente terrible", dijo y consideró que el fallo es la "privación de nuestro derecho de imponer restricciones razonables", lo que para la gobernadora demócrata es un "día negro". Sin embargo, afirmó: "No nos echaremos atrás, nos defenderemos".

Nueva York, que vive una ola de criminalidad elevada y por eso busca disminuir los permisos para que la población se arme, está luchando para que la Corte no determine lo contrario y eso impulse un drástico incremento en violencia con armas de fuego.

Wayne LaPierre, vicepresidente de la NRA, eufórico. 

APJosé Luis Magana

Las últimas decisiones importantes de la Corte Suprema sobre los derechos de armas databan de 2008 y 2010. Esas decisiones ya habían establecido el derecho nacional a tener un arma en casa para defensa propia. La pregunta para el tribunal ahora es si existe un derecho similar en la Segunda Enmienda para portar un arma de fuego en público.

En lo político, la decisión del máximo tribunal considera que Nueva York viola los derechos consagrados en la Segunda Enmienda y pega de lleno en las aspiraciones de la administración Biden, que trabaja desde hace semanas en busca de lograr un acuerdo con los republicanos para un control de armas light. A partir de ahora, cualquier ciudadano neoyorquino estará habilitado para viajar armado o entrar con un revolver a un restaurante. 

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La ley vigente en el Estado de Nueva York es de 1913 y establece que los licenciatarios de armas deben justificar una causa que los obligue a portar una. La mayoría conservadora de la Corte avaló el reclamo de los dos ciudadanos que habían sido representados en los tribunales por la  sección local de la Asociación Nacional del Rifle.

Tras las matanzas de Búfalo (10 muertos) y Uvalde (21), el Estado de Nueva York había elevado en las últimas semanas la edad legal para comprar armas semiautomáticas. Aunque la llamada ley de bandera roja, que autoriza a un juez a confiscar el arma a alguien que constituya una amenaza para terceros o para sí mismo, ya estaba vigente en Nueva York, no sirvió para impedir la matanza racista de Búfalo el 14 de mayo.