"Si la Corte Suprema de Justicia se demorara en este punto de declarar la inconstitucionalidad en el caso del Consejo de la Magistratura de la reforma judicial, hay que hacer un esfuerzo de la oposición para conformar un esquema para ganarle al kirchnerismo", propueso el diputado Alfonso Prat Gay.

El diputado que forma parte de la Coalición Cívica que no reconoce el liderazgo de Lilita Carrió, propuso "establecer una lista fuera de los partidos, poniendo como candidatos a consejeros a notables o figuras reconocidas que vayan a competir contra los candidatos de la presidenta Cristina Fernández".

"La idea es que sea una lista única de un frente nacional con consejeros independientes", aseveró el diputado en declaraciones a radio El Mundo y explicó que el objetivo es "ganarle al kircherismo", porque en caso de triunfar este frente nacional, la oposición se "quedaría con ocho de los doce cargos en juego" del Consejo de la Magistratura.

Prat Gay convocó a los opositores que cuestionaron la reforma judicial impulsada por el Gobierno a "no presentar consejeros en la boleta partidaria". "Armar este a favor de una justicia independiente sería una derrota tremenda para ellos (por el oficialismo), y en ese marco estarían dispuestos a suspender las primarias", consideró Prat Gay. 

La propuesta de Prat Gay es extraña, ya que el kirchnerismo se cuidó de explicitar en la ley que no se puede presentar una boleta sólo para la categoría de consejeros, precisamente para evitar que la oposición forme un frente de este tipo.

Pero no contento con esta restricción dispuso al modificar la norma en el Senado que además aquellas fuerzas que presenten el tramo de consejeros deben competir en 18 distitos -para presidente se exige sólo cinco- y deben hacerlo con la misma alianza de partidos. Es decir que para concretar lo que propone Prat Gay todas las fuerzas opositoras más importantes del país (UCR, PRO, FAP y Peronismo disidente) deberían fundirse en una única sigla y unificar sus boletas o al menos dirimirlas en las primarias.