Haciendo gala de su lengua filosa, Luis Juez repartió para todos y le pegó por igual al oficialismo y a la oposición por la aprobación de la reforma judicial. El senador cordobés criticó el proyecto oficial, al que calificó de “bochorno”, “vergüenza” y “torpeza”.

"Es una oportunidad perdida porque esta Justicia es de cuarta. Hay que cambiarla, oxigenarla pero la forma no es esta. Mucho menos metiéndole pecheras partidarias a los integrantes del Consejo de la Magistratura", declaró en el programa “El fin de la metáfora” de radio Nacional Rock. “Se esconde una intención de manipular la justicia”, agregó Juez, que opinó que se "complica decididamente la calidad institucional"

En relación a la elección de los nuevos consejeros, el cordobés dijo que su propuesta es que “no presentemos candidatos al Consejo para no convalidar en los hechos lo que cuestionamos en el Derecho”. Sin embargo, dijo que no “eco”, porque algunos miembros del FAP “se hacen los boludos”.

Respecto a las modificaciones finalmente aceptadas por el Gobierno, Juez cuestionó las idas y vueltas y también abonó la teoría de un pacto con la Corte. “Esto era imposible de modificar hace 20 días, pero se enculó el Perro Verbitsky y abrió el debate por el tema de las cautelares, que era lo mismo que decíamos nosotros”, señaló. "Hace 20 días la reforma estaba más blindada que la caja fuerte de la BCRA”, continuó.

Sobre los cambios en la Magistratura, indicó que Cristina Kirchner negoció con Ricardo Lorenzetti y le apuntó directo al magistrado. “Cómo no vamos a querer cambiar la Justicia si el presidente de la Corte Suprema en vez de pedirle más transparencia, mas independencia, más democracia, le pidió la plata, la caja. Y de paso le pidió elegir los secretarios sin concurso. Pero pedazo de hijo de puta cómo no van a rendir concurso tus secretarios, son los primeros que deben rendir concurso”, lanzó.

“Unos boludos terribles”

Juez también le apuntó a todos los diputados que decidieron retirarse del recinto luego de la votación del artículo 2 de la reforma del Consejo, lo que desató un escándalo. "Son unos boludos terribles. Se los dije a los diputados nuestros: hay que entrar, discutir, ganar o perder pero hay que bancársela porque son las reglas de la democracia", afirmó.

"Esta cosa histérica que me levanto, que pum, que pam, que hago un quilombo. Eso no está en mi cabeza. Yo odio tanto al kirchnerismo bobo como a la oposición estúpida", continuó. Me pareció una imbecilidad absoluta levantarse y no dar el debate, porque seguramente en el tema de las cautelares no hubiesen tenido los votos", agregó.

Juez también se refirió a las presiones mediáticas que reciben los opositores y a ciertas actitudes de éstos. “Yo no necesito que ningún editor o comentarista radial o televisivo me venga a decir lo que tengo que decir o hacer, o con quien me tengo que juntar (…) Pareciera que para algunos solo sirve juntarse con Macri o De la Sota, con una banda de impresentables, para ser oposición", siguió.

En este sentido, apuntó sus críticas contra a Elisa Carrió: “Va a lo extremo, con discursos agraviantes, ofensivos, humillantes. Pareciera que esa es la oposición que sirve y eso no sirve ni para bosta. No sirve lo que dice (Agustín) Rossi ni Carrió porque son dos provocadores por naturaleza".

“Me afecta que crean que para hacer oposición hay que hacer lo que hace Carrió y lo que hace ella es un acto de provocación permanente. Nunca construyó nada. No le dura nada. Fue incapaz de construir un partido político. Es todo testimonial a partir de su visión individualista”, fustigó.

Las críticas a Carrió derivaron en cuestionamientos a la estrategia electoral del FAP (“No me gusta Prat Gay”) y al líder de Proyecto Sur, Pino Solanas. “Si viviera en Capital, lo votaría a Pino, pero no entiendo qué carajo hace con Carrió”, concluyó.