Daniel Scioli llegará mañana sobre el mediodía a Santiago de Chile para avanzar en una misión comercial que incluye una evaluación de la experiencia chilena en la estatización del juego online. Será uno de los primeros pasos concretos para dejar ese negocio en manos del Estado bonaerense y que -aunque no lo dicen- se sabe que será un largo proceso que podría durar unos dos años.
En el Ejecutivo promocionan el viaje y brindan algunos detalles de la agenda, aunque nada informan sobre el modelo chileno del juego que avanza hacia la privatización con las mismas empresas que operan en Argentina, puntualmente en el territorio bonaerense.
La principal empresa que opera el control online en Chile es GTECH Corporation, una compañía asociada a Boldt que impugnó semanas atrás una supuesta "inconstitucionalidad" en el llamado a licitación lanzado por la administración Scioli para la renovación del servicio de apuestas online.
Por el momento, la iniciativa de Scioli de no renovar la concesión del juego online que vence en noviembre próximo no está demasiado clara. Se sabe que el presidente del Grupo Bapro, Santiago Montoya, será quien estará a cargo de la gestión de ese tipo de apuestas, según se dijo a través de una de las empresas del Bapro. Según trascendió, esa empresa sería Provincia Pagos.
Sin embargo, Montoya no está del todo conforme con la operación. En realidad, el malestar del ex titular de la Agencia de Recaudación tiene que ver tanto con el mecanismo impuesto por el Gobernador como con los plazos previstos.
La modalidad que quiere impulsar Montoya tiene que ver con crear una nueva empresa bajo el paraguas del Grupo Bapro y no optimizar la estatización a una empresa ya en funcionamiento. Según pudo saber La Política Online, por ahí pasan por estos días las diferencias entre Daniel Scioli y el propio Montoya.
Según pudo saber La Política Online, Montoya estudia para su regreso a Buenos Aires una conferencia de prensa en la que explicaría la complejidad técnica de la operación y buscaría bajar la expectativa al proceso de estatización.
En paralelo, sectores de la oposición en la Legislatura bonaerense estiman que el viaje solamente busca distraer mientras se acerca la fecha de término de la concesión para renegociar contratos.
