La política del gobernador republicano Greg Abbott tiene un apoyo abrumador en la inmensidad del estado de Texas. Así surge de una encuesta reciente realizada por la Escuela Hobby de Asuntos Públicos de la Universidad de Houston.

La encuesta, que fue realizada entre el 9 y el 19 de enero pasados, encontró una altísima aprobación entre los tejanos con respecto a tres políticas de inmigración y seguridad fronteriza que el gobernador Abbott ha implementado en los últimos años y se propone extender en el tiempo: desplegar la Guardia Nacional de Texas para patrullar a lo largo de la frontera de Estados Unidos con México, gastar unos $ 2 mil millones al año en seguridad fronteriza y pagar incluso el envío de los solicitantes de asilo en autobús a las ciudades del norte como Chicago, Nueva York, Filadelfia y Washington DC, donde gobiernan los demócratas.

La novedad está en la opinión de los tejanos con respecto a la medida que el gobernador inauguró durante la campaña electoral y lo convirtió en protagonista nacional de la discusión sobre la inmigración.  

De acuerdo a la encuesta, dos tercios (65 %) de los tejanos apoyan el despliegue de la Guardia Nacional de Texas para patrullar la frontera que separa a Estados Unidos de México. De ese total, un 42% apoya firmemente la política del gobernador y un 23% lo respalda en forma parcial. El contraste es claro: solo un tercio (35%) de los tejanos se oponen a esta política y no con la misma intensidad. De ese total, apenas el 20% dice que rechaza fuertemente la presencia de la Guardia Nacional en la frontera y el 15% restante afirma que lo hace en forma parcial.

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Del sondeo de la Escuela Hobby que dirigió el politólogo de la Universidad de Houston Mark P. Jones surge además que el 61% de los tejanos aprueba que el estado gaste $2 mil millones de dólares al año en seguridad fronteriza: un 36% lo hace fuertemente y un 25% en parte. El trabajo muestra que el 39% de los habitantes de Texas se opone a que el estado gaste $2 mil millones anuales en seguridad fronteriza, 22% fuertemente y 17% un poco. La cifra que es más elevada que en otros casos puede deberse tanto al rechazo a la política de seguridad de Abbott como al gasto estatal en la materia, algo que suele ser rechazado por parte de los republicanos.

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La novedad está en la opinión de los tejanos con respecto a una decisión que el gobernador republicano tomó durante el año de la campaña electoral en la que fue reelecto para su tercer mandato y que lo convirtió en protagonista nacional de la discusión sobre la inmigración. 

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Consultados sobre la medida de expulsar a los migrantes de Texas y enviarlos a las ciudades del norte en las que gobiernan los demócratas, el 58% de los tejanos se declararon a favor de que el estado pague para enviar a los solicitantes de asilo a los distritos demócratas (el 38 % apoya firmemente y el 25 % lo hace en algo). Aunque es menor, el rechazo existe: el 42% de los tejanos se declara en contra de la expulsión en transporte escolar, el 32% lo hace fuertemente y el 10% en algo.

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Por supuesto, cuando se distingue a los encuestados en torno a ideología partidaria, la división entre republicanos y demócratas se muestra con absoluta claridad. Mientras que el 95% de los republicanos apoya el despliegue de la Guardia Nacional de Texas en la frontera, lo mismo hace el 69% de los independientes y solo para el 35% de los demócratas. Mientras que el 88% de los republicano aprueba que el estado de Texas gaste $2 mil millones de dólares anuales en seguridad fronteriza, lo mismo hace el 59% de los independientes y solo el 40% de los demócratas. Mientras que el 86% de los republicanos avala que Texas pague para enviar a los solicitantes de asilo en autobús a las ciudades del norte, lo mismo hace el 59% de los independientes y sólo el 31% de los demócratas.

Las diferencias ideológicas saltan a la vista en la encuesta. Mientras el 86% de los republicanos avala que Texas pague para enviar a los migrantes en autobús a las ciudades del norte, lo mismo hace el 59% de los independientes y sólo el 31% de los demócratas. 

Por último, los tejanos blancos son significativamente más propensos que los tejanos latinos y negros a apoyar a los tres políticas. Mientras que el 73% de los texanos blancos apoyan el despliegue de la Guardia Nacional de Texas en la frontera, lo mismo ocurre con el 58 % de los latinos y el 51 % de los tejanos negros. Mientras que el 72% de los blancos apoya que el estado gaste $2 mil millones de dólares anuales en seguridad fronteriza, lo mismo opina el 53% de los latinos y el 45% de los tejanos negros. Mientras que el 67% de los tejanos blancos apoya el estado paga a los solicitantes de asilo en autobús a las ciudades del norte, lo mismo es cierto para el 52% de los latinos y 39% de tejanos negros.