Un caso de resonancias globales viene alterando los nervios de Greg Abbott. Por orden del presidente de la Corte Suprema de Texas, Nathan Hecht, el gobernador republicano se prepara para nombrar dos jueces en el máximo tribunal y definir un pleito judicial que enfrenta al Estado con las automotrices alemanas Volkswagen y Audi.
La movida de Texas acaba de generar una fuerte advertencia de los abogados de Volkswagen, que afirman que el gobernador busca tener una "influencia indebida" en el expediente que podrÃa costarle millones de dólares a las empresas. El estado es parte en los casos que inició el Fiscal General Ken Paxton contra las dos compañÃas.
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La Corte Suprema tiene que dictar sentencia sobre un esquema de engaño de emisiones descubierto en 2015, pero se ve impedida de hacerlo debido a la renuncia de los jueces Jimmy Blacklock y Evan Young, que dejaron al tribunal con siete miembros para pronunciarse sobre el caso. Como la constitución de Texas requiere que al menos cinco jueces estén de acuerdo, las automotrices saben bien que los jueces restantes estaban divididos y ven el nombramiento de dos magistrados más como un golpe de Abbott para definir el caso a su favor.
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El choque del gobernador con las dos compañÃas alemanas escaló a partir del 24 de junio pasado, cuando Hecht le pidió al gobernador que encomendara temporalmente a dos jueces al tribunal superior del estado para lograr la mayorÃa necesaria.
Según publicó Texas Tribune, con decenas de miles de vehÃculos impactados en Texas, varios millones de dólares podrÃan estar en juego en el expediente, de acuerdo al código de sanciones civiles del estado.
La evidencia es contundente, dado que en 2015 Volkswagen admitió haber engañado a los reguladores al diseñar un software que eludió las pruebas de emisiones de Estados Unidos. Sin embargo, lo que se juzga es si Texas tiene jurisdicción sobre las empresas de matriz extranjera como Volkswagen y Audi.
Los abogados de Volkswagen y Audi, en tanto, afirman que el gobernador ejercerá "una influencia indebida" si nombra jueces que pueden fallar a favor del Estado en un conflicto que le permitirÃa al Estado ganar millones de dólares. Lo dijo el abogado de Volkswagen, Jeffrey Wall, en una carta le envió a las partes y dio a publicidad:."En pocas palabras, el Estado no puede elegir dos jueces que ayuden a decidir si gana o pierde ante este tribunal".
Abbott aparece entre la espada y la pared. Tiene que endurecer su postura o dar por pérdido un conflicto que afectará las arcas del Estado. Si el gobernador no designa los dos jueces más, el tema podrÃa volver a la Corte de Apelaciones de Texas, donde Volkswagen y Audi ya habÃan argumentado con éxito que Texas no tenÃa jurisdicción sobre las empresas extranjeras.
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