Los negacionistas, que apoyan la negativa de Donald Trump de que el presidente Joe Biden ganó las elecciones en el 2020, ahora exigen en el estado de Nevada que la votación del 8 de noviembre se lleve a cabo sin tecnología, únicamente con boletas de papel, mientras intentan ocupar el puesto de autoridad electoral en el estado.

Nada es casual. En estos comicios, uno de los más firmes impulsores de la versión falsa de que Trump ganó la pasada elección, el republicano Jim Marchant, aspira en cerrada contienda al puesto de Secretario de Estado de Nevada, la autoridad de todo cuanto tiene que ver con elecciones en el estado.

Marchant ha prometido en campaña que si gana la elección lo primero que hará será "des-centificar" los resultados de la elección presidencial del 2020. Piensa que si comienza por hacerlo en Nevada, su acción hará que lo sigan en otros estados.

El apoyo millonario para la candidata latina de Biden no garantiza el triunfo demócrata en Nevada 

En su campaña, el candidato trumpista propone eliminar el voto por correo, impugnar o quitar el voto llamado temprano que inicia una semana antes para apoyar a quienes se les dificulta ir a votar, y que los comicios se hagan solo en persona en los centros de votaciones.

Según Politico, si Marchant gana la elección y se convierte en el principal funcionario electoral en Nevada, quedaría a cargo de llevar a cabo la votación en el estado decisivo para las presidenciales de 2024. Podría remodelar las elecciones aquí, con enormes ramificaciones en la forma en que se llevan a cabo en Nevada.

Pero además, si Marchant y su equipo ganan esta elección, en el estado prevalecerá la idea de Trump de que la firma Dominion tergiversó deliberadamente la votación presidencial para favorecer a Biden.

Hace un año, Dominion Voting Systems demandó por $1,600 millones por difamación a Fox News, y a los entonces abogados de Trump, Rudy Giuliani y Sidney Powell, quienes sin ninguna prueba decían que las máquinas de votación fueron diseñadas en Venezuela para perjudicar a Trump.

Marchant ya consiguió que el condado de Nye desconfíe de los votos en elección temprana y por correo aunque sin prohibirlos, pero no se conforma. Ahora se prepara para que la elección sea solo en persona en las urnas en boletas de papel.

El candidato republicano a Secretario de Estado de Nevada, Jim Marchant.

AP

La decisión del condado con seguidores de Trump fortalece la campaña de Merchant porque confirma que es posible cambiar reglas electorales y puede influir en el proceso en otros condados o incluso en los resultados electorales si son desventajosos para los negacionistas.

Por qué crece Kari Lake, la negacionista extrema que se proyecta desde Arizona como compañera de Trump

"Ustedes quizás escucharon que convencí a un condado, aquí en Nevada, de implementar un nuevo prototipo para el sistema electoral", comenzó diciendo Merchant en una concentración ante un grupo de simpatizantes. Además, aseguró que es una modalidad electoral que pretenden implementar en todo el país, si contamos con su ayuda".

En entrevista con el ultra conservador Legacy PAC, Merchant declaró que las contiendas (electorales) para secretario de estado son críticas para nuestro país, especialmente en este ciclo. "Me pidieron que me postulara para secretario de Estado. Y acepté, y la razón es porque controlamos el sistema electoral", dijo.

Me pidieron que me postulara para secretario de Estado. Y acepté, y la razón es porque controlamos el sistema electoral.

Encuestas del Nevada Independent y de CNN en octubre dieron ligera ventaja a Merchant sobre Cisco Aguilar, su rival demócrata latino. La campaña de Aguilar, con menos fondos que la de Merchant, tiene que presentarse de puerta en puerta en busca de electores y explicar todo un embrollo de declaraciones sin bases comprobables de los negacionistas.

El Sindicato de Trabajadores Culinarios de Nevada, la organización laboral más fuerte en el estado, que incluye al personal de casinos y hoteles en Las Vegas, ha desplegado a sus agremiados en apoyo a Aguilar para ir a tocar puertas.

Cisco Aguilar por su parte sigue una estrategia en la que evita meterse al campo de batalla de la retórica negacionista y utiliza sus recursos en tratar de que Merchant y su equipo se expongan con sus propios errores.

En mensaje de campaña en televisión, Aguilar deja que el propio Merchant se exponga: su campaña es "para tratar de arreglar el 2020" y para eso empezar por "deshacerse de la votación anticipada". Al final, Aguilar deja un breve mensaje que parece una respuesta a su rival: "Defenderé su derecho al voto", dice.

El Sindicato de Trabajadores Culinarios de Nevada, que incluye al personal de casinos y hoteles en Las Vegas, ha desplegado a sus agremiados en apoyo al demócrata Aguilar.

La Secretaría de Estado aclara en mensaje en su portal oficial que su "sistema de votación de Nevada es un ‘sistema independiente' que no está conectado a una red, Internet, y no tiene capacidades de conexión inalámbrica. Antes de que cualquier componente pueda usarse en el sistema de votación de Nevada, primero debe pasar por una serie de pruebas y auditorías".

Por su parte la fiscalía federal en Nevada eligió de manera preventiva a su zar para esta elección. El fiscal federal Jason Frierson anunció que su asistente Daniel Schiess liderará los esfuerzos para el Distrito de Nevada en relación con el Programa Nacional del Día de las Elecciones del Departamento de Justicia para el 8 de noviembre.

Schiess es ahora Oficial Electoral de Distrito (DEO) de Nevada y, según informó el fiscal, es responsable de supervisar el manejo de las quejas, preocupaciones por los derechos al voto, amenazas de violencia a los funcionarios electorales o al personal, y fraude electoral, en consulta con la sede del Departamento de Justicia en Washington.