
El cacus republicano de Iowa representa la lÃnea de largada para la campaña presidencial 2024. En el primer test electoral de la oposición, Donald Trump pondrá a prueba su hegemonÃa. Ron DeSantis y Nikki Haley buscarán dar la sorpresa e instalar la sensación de que, al menos, la competencia se encuentra abierta. Pero lo cierto es que, a pocas horas del inicio de la participación republicana, no hay demasiados cisnes negros a la vista.
"El caucus es más que decisivo porque Iowa es un estado pequeño y tiene un número limitado de delegados, tradicionalmente expone por dónde pasa la cuestión. Es el punto de partida del partido. Esperamos que esos cómputos marquen una tendencia de lo que será el resto de las elecciones primarias", explica el colombiano Jaime Florez, vocero en español del Partido Republicano.
La novedad de este caucus, según destaca Florez, es que no hay precedentes de tanta diferencia entre un postulante y el resto del pelotón. "Está prácticamente definido, acorde a las encuestas. PodrÃa significarle la elección de suficientes delegados como para ganar en la Convención de julio, aunque da la impresión de que la definición podrÃa llegar mucho más rápido, tal como vienen las encuestas", opina el vocero del GOP ante LPO.
En los últimos dÃas el expresidente escaló su retórica en contra de Haley. La acusó de ser compasiva con China y de no ser lo suficiente dura respecto a la crisis en la frontera sur. ¿La estrategia sugiere que la ex embajadora en la ONU expresa una amenaza real contra el dominio de Trump? No parece, aunque Haley sà ganó visibilidad y apoyos en las últimas semanas.
"Trump va a ganar holgadamente en Iowa y en New Hampshire, los dos primeros caucus", pronostica ante LPO el mÃtico consultor Dick Morris. Analista y consejero part-time de Trump, Morris afirma que el expresidente arrasará en la carrera interna frente a Haley y DeSantis. Y que además volverá a la Casa Blanca ante un Joe Biden debilitado. "Ganará las otras primarias en Michigan y Carolina del Sur y, luego, en el Súper Martes, cuando se seleccione el 45% de los delegados. Será el comienzo de una marcha triunfal de Trump hacia la nominación definitiva", asegura.
Algunas encuestas adelantan que la brecha entre Trump y Haley podrÃa ser de hasta 50 puntos. Con esos números, la misión de la exgobernadora de Carolina del Sur se asemeja a desafiar la ley de gravedad.
Para alivio de Haley y el gobernador de Florida Ron DeSantis, Iowa no siempre funcionó como predictivo perfecto de quién serÃa el nominado partidario. Joe Biden perdió en Iowa y New Hampshire, antes de ser el elegido por los demócratas y de acceder a la Casa Blanca. Y los últimos tres nominados del Partido Republicano perdieron en los caucus de Iowa. Por eso la pelea por el segundo puesto entre Haley y DeSantis puede volverse importante a futuro.
Pese al dominio que muestra en la previa, Trump pretende no repetir el traspié de 2016. Hace 8 años debutó con una derrota contra el texano Ted Cruz. En la previa de aquel caucus, el entonces outsider ya era el favorito para ganar la interna colorada. Por eso ahora el jefe alienta la votación entre las bases republicanas, pese a las temperaturas bajo cero que complican la movilidad en Iowa. Trump no quiere sorpresas.
Pero la brecha entre él y los demás candidatos esta vez es mucho mayor que entonces. Además el actual equipo de campaña de MAGA se muestra mucho más profesional que el de 2016. El team trumpista reclutó una red de militantes para garantizar una participación amplia entre los afiliados al GOP.
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