Como se anticipaba desde meses atrás, México no logró ningún acuerdo con Estados Unidos en torno a las reglas de origen establecidas en el T-MEC para el sector automotriz, por lo que este jueves solicitaron de manera oficial un panel de resolución de controversias.
La SecretarÃa de EconomÃa confirmó que ya se presentó la solicitud para hacer uso de esta herramienta que provee el T-MEC, a través del cual se tomará una resolución sobre la interpretación del capÃtulo 4 del acuerdo comercial trilateral. México -y Canadá- argumenta que la lectura de Estados Unidos es "incorrecta".
Como se ha explicado, las autoridades mexicanas aseguran que, en el acuerdo discutido entre México y EU, entonces por la administración de Donald Trump, se estableció que si se llegaba al 70% de productos locales en la fabricación de autos podrÃan considerarse como 100% regionales. Pero con la administración de Joe Biden la interpretación es que no debe ocurrir esta especie de redondeamiento en las cifras. Una postura que se interpreta mucho más nacionalista.
"Estados Unidos no coincide con esa posición y no permite a los productores de automóviles beneficiarse de esas metodologÃas. México considera que la decisión de un panel brindará certidumbre a la industria automotriz en beneficio de la competitividad de la región. Una vez presentada esta solicitud, se procederá a designar a los integrantes del panel. Posteriormente, el panel deberá emitir un calendario procesal a las partes", señaló la dependencia en su comunicado.
Desde agosto pasado los tres paÃses participaron en el proceso de consultas para resolver esta diferencia de interpretación, que es un proceso de diálogo en el que se busca evitar que el conflicto escale al panel, sin embargo, ninguna postura se movió de lugar, lo que llevó a iniciar esta solicitud por parte de México.
Vale recordar que la industria automotriz tiene un peso de poco más de 24% en el total de las exportaciones del paÃs y este sector, además del pleito por las reglas de origen, que dificultarÃan su competencia con Estados Unidos, también enfrenta el temor de que se aprueben estÃmulos en las compras de carros eléctricos en dicho paÃs.
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