La decisión de bloquear las importaciones de petróleo proveniente de Rusia condenará a la administración Biden a llegar con muy pocas chances a noviembre debido a que la inflación seguirá golpeando a los votantes. "Era una elección difícil, porque el riesgo de que esto termine por sacar al demócrata de la contienda electoral es altísimo. Al final del día, los votantes lo van a castigar a pesar de que haya tenido razón en aplicar esa medida", describió a LPO Alberto Bernal, jefe del banco de inversión XP Investments desde Miami. "La gente vota con el bolsillo y por eso no va a acompañar a Biden", agregó.

Tal como venía advirtiendo este medio, el presidente no tenía demasiadas oportunidades de esquivar la prohibición del crudo ruso. Las tensiones bélicas en Ucrania y la falta de resultados para apaciguar la guerra lo dejó con una única opción: golpear a Rusia donde más le duele.

Biden prohíbe la importación de petróleo y gas de Rusia y advirtió que subirán los precios en el país 

Pero esa medida no es inocua para la Casa Blanca y Biden se encargó de hacerlo público: "Dije que me sinceraría con el pueblo estadounidense desde el principio. Cuando hablé por primera vez de esto, dije que defender la libertad va a costar. A nosotros también nos va a costar en Estados Unidos", explicó al momento de anunciar la prohibición de importar gas y petróleo desde Rusia.

Para Biden la decisión tampoco fue algo sencillo ya que en una primera instancia evitó aplicar ese bloqueo. Lo hizo a pesar de los pedidos de miembros clave del oficialismo como Nancy Pelosi, y de una mayoría del Partido Republicano. Pero la iniciativa para sacar una ley convalidada tanto por demócratas como republicanos terminó por dejar sin opción al presidente, que decidió tomar la iniciativa.

Además, aunque no resulte, Biden podrá culpar también a los republicanos por el incremento del precio del combustible en el país que ya supera un récord en 14 años y donde dependiendo del estado, ya cuesta más de 6 dólares el galón. 

Era una elección difícil, porque el riesgo de que esto termine por sacar al demócrata de la contienda electoral es altísimo. Al final del día, los votantes lo van a castigar a pesar de que haya tenido razón en aplicar esa medida. La gente vota con el bolsillo y por eso no va a acompañar a Biden

Tampoco estaría contradiciendo el sentimiento del votante. Según una reciente encuesta, la población apoyaba una medida más drástica contra Rusia. De hecho, otros sondeos decían que uno de los culpables de que Putin se animara a invadir Ucrania era la "debilidad" del presidente estadounidense. Pero más allá de eso, siete de cada diez estadounidenses decían que apoyan una prohibición del petróleo ruso incluso si eso significa precios más altos de la gasolina en el país, según Quinnipiac.

Jorge Piedrahita, CEO de Gear Capital en Nueva York, dijo a LPO que "lo queda claro es que estos eventos geopolíticos van a hacer que el petróleo sea más caro y que haya una persistencia en la inflación". "Además, la suba del precio del petróleo actúa como un impuesto, o sea el dinero disponible para la economía doméstica será menor y por consiguiente baja el consumo", explicó.

Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal

AP

"La inflación va a jugar un rol importante en esta elección. Creo que tienen que dar señales de que la quieren controlar", agregó.

Bernal dice que aún no hay que esperar que esta crisis global y una inflación en ascenso produzcan una recesión, o lo que se conoce como "estanflación" (recesión e inflación). De eso dependerá lo que haga la Reserva Federal que a mediados de mes decidirá una aumento simbólico del costo del dinero (25 puntos básicos desde niveles insólitamente bajos). 

Si la Fed no sube la tasa para que la economía crezca a costa de la inflación, desde el punto de vista político, es como si favoreciera a Biden. No tienen otra alternativa que subir las tasas. Dada la incertidumbre global, será de 25 puntos básicos, después dependerá

"Creemos que va a subir 4 veces este año pero por debajo de lo que estimaba el mercado hasta ahora. Van a tener que subir la tasa, pero ya está en situación de riesgo muy fuerte para el crecimiento de la economía, por lo tanto no será tanto", señaló el director de XP Investments. Por ahora no cambiará su pronóstico de crecimiento del PBI para este año de 3,5% pero alertó que hay serios riesgos a la baja. 

Piedrahita advierte que la Fed no puede jugar tan abiertamente para el gobierno y no subir las tasas para que no genere una caída en la economía. "Si la Fed no sube la tasa para que la economía crezca a costa de la inflación, desde el punto de vista político, es como si favorece a Biden. No tienen otra alternativa que subir las tasas. Dada la incertidumbre global, será de 25 puntos básicos, después dependerá", aseguró el CEO de Gear Capital.

Sea como fuere, la inflación que está en máximos de 40 años lejos de ser "transitoria" como decía Jerome Powell, se volverá algo más permanente. Una mala noticia para las aspiraciones electorales del Partido Demócrata que se estaba entusiasmando en las últimas horas con un efecto positivo que algunas encuestas mostraban tras el discurso del Estado de la Unión. Biden ya le puso nombre a lo que será una suba mayor en los combustibles en el país: "La suba de precios de Putin". Una excusa que se pondrá a prueba en noviembre.