Si bien los latinos son el único grupo demográfico que proyecta aumentar las tasas de compra de viviendas durante los próximos 20 años, son los que más barreras tienen para acceder a ellas. La principal, según todos los estudios recientes, tiene que ver con la falta de financiamiento para acceder a la primera hipoteca que cambie el estatus de arrendatario a propietario. Por eso, una de las organizaciones más grandes del país que defienden los derechos de los latinos y el gigante financiero Wells Fargo (el cuarto mayor banco del país) se unieron para lanzar un programa llamado HOME (Home Ownership Means Equity) que contará inicialmente con un financiamiento de $10 millones cada uno. El objetivo: impulsar la creación de cuatro millones de nuevos propietarios latinos para el 2030.

La importancia de los latinos en el mercado de viviendas es clara. Urban Institute predijo que para 2040, más del 20% de los hogares habitados será por jóvenes hispanos. Este es el triple que en los '90. Y que entre 2020 y 2040, 70% de todos los nuevos propietarios de viviendas serán latinos.

"El gran problema que tenemos hoy es el déficit y la población latina se ve afectada por el recorte del presupuesto" 

Por eso, el acceso y las oportunidades para vivienda tendrán un papel importante en la configuración del futuro mercado inmobiliario del país. Pero los hispanos enfrentan barreras en el camino. Comparados con los blancos, los latinos son más jóvenes y tienen niveles más bajos de ingresos y riqueza. 

También tienen puntajes de crédito más bajos en familias medias y numerosas y multigeneracionales. En parte debido a estas características son también más propensos a ser compradores de viviendas por primera vez: de ahí que se desprende que el principal grupo demográfico del país necesita préstamos pequeños.

Y ahí aparece este programa de UnidosUS, cuya cara visible es Janet Murguía, con Wells Fargo. La entidad es el primer financiador de HOME como parte de una inversión filantrópica más amplia de $25 millones en los programas centrados en la comunidad de UnidosUS y en los socios afiliados sin fines de lucro para promover la propiedad de vivienda entre los latinos. 

De los $25 millones en financiamiento de subvenciones, $10 millones apoyarán el desarrollo de la iniciativa HOME, igualando una inversión de $10 millones por parte de UnidosUS y poniendo en marcha un esfuerzo de recaudación de fondos de $100 millones para respaldar los objetivos del programa durante los próximos siete años. 

De aproximadamente 112.000 empresas de desarrollo inmobiliario en los Estados Unidos, alrededor de 111.000 de ellas son propiedad de blancos. Y es aún peor: de 383 desarrolladores de primer nivel que generan más de $50 millones en ingresos al año, sólo uno es latino

Janet Murguía, presidenta de UnidosUS

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La iniciativa de UnidosUS apoyará la preparación de los compradores de casas, ampliará el acceso al crédito, aumentará la oferta de vivienda y preservará la propiedad de vivienda. Para impulsar varios elementos de este programa, lanzarán el primer grupo de ciudades seleccionadas para recibir inversiones específicas a través de HOMEownership Solutions Network. El primer grupo incluye a Chicago, Illinois; Phoenix, Arizona; Stockton, California; Orlando, Florida; y Houston, Texas, comunidades con grandes poblaciones latinas y enormes oportunidades de vivienda para posibles compradores y constructores latinos.

"Durante mucho tiempo, la vivienda ha brindado el camino más efectivo para que las familias construyan una riqueza generacional en Estados Unidos. Si bien los latinos continúan enfrentando barreras para convertirse en propietarios, también tienen la mayor oportunidad de crecimiento en los Estados Unidos. Para maximizar esta oportunidad, estamos lanzando la iniciativa para ayudar a crear cuatro millones de nuevos propietarios latinos para el año 2030," afirmó Janet Murguía, Presidenta y Directora Ejecutiva de UnidosUS.

"Nuestra estrategia integral ayudará a dar forma a las reformas políticas necesarias al tiempo que proporciona herramientas y recursos que los latinos necesitan para navegar con éxito el proceso de compra de vivienda. Fortalecerla no solo es una política inteligente, sino que también generará dividendos económicos para barrios, comunidades y nuestro país", agregó.

El año pasado, UnidosUS realizó una encuesta junto a red Wealth and Housing Alliance (UWHA) (antes llamada National Homeownership Network) sobre préstamos hipotecarios de bajo monto. Cuando se les preguntó acerca de las consecuencias de la falta de préstamos hipotecarios disponibles y el efecto en la comunidad latina, los encuestados destacaron un tema clave: la falta de acceso al financiamiento.

La falta de acceso a pequeños préstamos los lleva a utilizar mecanismos de financiación informal o no convencionales para obtener la propiedad. El 34% de los deudores hispanos reportaron usar al menos una alternativa fuera del sistema en comparación con el 19% de los blancos no hispanos.

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Con demasiada frecuencia, los métodos de financiación alternativos conllevan costos y un nivel de endeudamiento riesgoso. "Esta es una historia demasiado familiar para las familias latinas que buscan una vivienda y hace que experimenten mayores costos y mayores riesgos en comparación con otros. Un mercado de hipotecas en dólares pequeños más robusto y accesible proporcionaría opciones de financiamiento seguras y confiables para compradores de vivienda latinos", decía el informe publicado en diciembre pasado.

Una investigación en The New York Times detectaba que, también, parte del problema es la poca representación latina en la industria inmobiliaria. Así como sucede con los Venture Capital u otros fondos que ahora específicamente invierten en latinos (porque los tradicionales no lo hacen), también sería necesaria una mayor presencia del lado de la oferta de inmuebles. 

Urban Institute predijo que para 2040, más del 20% de los hogares habitados será por jóvenes hispanos. Esto es el triple que en los '90. Y que entre 2020 y 2040, 70% de todos los nuevos propietarios de viviendas serán latinos

En ese artículo contaban que de aproximadamente 112.000 empresas de desarrollo inmobiliario en los Estados Unidos, alrededor de 111.000 de ellas son propiedad de blancos. Y es aún peor: de 383 desarrolladores de primer nivel que generan más de $50 millones en ingresos al año, sólo uno es latino.

La escasez de diversidad en la parte superior es importante porque ahí es donde los desarrolladores pueden tener el mayor impacto en las comunidades e impulsar el mayor crecimiento económico. La falta de representación comienza con la falta de capital, ya que las personas negras y latinas que esperan ingresar al desarrollo inmobiliario a menudo ni siquiera pueden acceder al capital inicial para comenzar.