Juan Manuel Barrero es un emprendedor argentino que abrió Lazo, su compañía, en Estados Unidos hace 18 meses. Con tan poco tiempo en el país, no sólo logró ser considerado un caso de "éxito" en el ecosistema de las empresas latinas sino que fue uno de los cinco emprendedores invitados en septiembre pasado a visitar la Casa Blanca en el marco del Mes de la Hispanidad junto a Kamala Harris.

"Un miércoles a las 6,30 pm estaba revisando los últimos emails del día, estaba en el sillón con mi mujer embarazada. Y me llega un correo que no entendía. Lo tuve que leer 3 veces", cuenta Barrero en diálogo exclusivo con LPO. Ese email era la invitación para estar al día siguiente, en horario del mediodía, en Washington. La improvisación del viaje y la sorpresa por la invitación fue tal que tan sólo atinó a salir corriendo a comprarse un traje (ya que no tenía) y sacar el primer vuelo que la mañana siguiente saliera para DC. "Me llegué a preguntar para qué iba, si valía la pena invertir tanta plata para salir corriendo a Washington. Y sí, valió completamente la pena", recuerda.

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Las cosas no surgen por casualidad, es una frase recurrente de Barrero. "Es una consecuencia de varias cosas". El emprendedor había ganado una beca en Standford que, por la pandemia, fue virtual y que luego fue invitado para conocer la universidad y codearse con otros colegas de la industria. "Y ahí conozco a VCFamilia, que son todos los que trabajan en venture capital. Es una comunidad para compartir conocimiento y ayudarse mutuamente entre latinos. A ellos se les ocurre armar Founder Familia, o sea emprendedores que levantan capital de riesgo. Empecé a estar ahí, a ayudar, hay todo tipo de emprendedores desde los que están iniciando y los que están en etapas más avanzadas", remarca.

Kamala Harris junto a Juan Manuel Barrero en la Casa Blanca

¿Pero entonces cómo llegaste a que te eligieran en la Casa Blanca para representar a emprendedores latinos?

La Casa Blanca tramitó la invitación vía Founder Familia. Y como a mi empresa le estaba yendo bien y querían llevar casos de éxito, me eligieron a mí. Ellos querían mostrar que no éramos emprendedores que estamos vendiendo tortillas, por el estereotipo del latino que viene a trabajar a EEUU, sino que éramos emprendedores con visión, ambiciones y que estábamos construyendo cosas. Tuvimos una reunión con ellos en la Casa Blanca junto a Kamala Harris y luego nos invitaron a la residencia de la vicepresidenta que nos recibió allí. 

Para los latinos el esfuerzo de levantar capital es el doble, y eso no va a cambiar de un día para el otro. Pero hay cosas que se van a ir dando. Estados Unidos se está dando cuenta del poder que tienen los latinos. Incluso creo que en algún momento tendrá un presidente de origen latino

¿En qué te cambió como emprendedor latino el hecho de que te hayas podido codear con la vicepresidenta? ¿Es una vidriera que sirve para los negocios?

Acá en Estados Unidos gusta mucho la historia del emprendedor, o sea el storytelling. Y todas estas cosas te van validando, pero esto recién empieza. No ganamos nada. Pero sirve. Acá tiene mucha importancia. Las instituciones, por ejemplo en Argentina de donde soy, perdieron mucho prestigio. Pero acá realmente las instituciones tienen mucho valor, y el impacto es muy bueno. La gente la valora mucho todavía.

¿Pero crees que te va a sumar mucho para el futuro de la compañía?

No le pongo expectativa a nada. A nivel negocio, no creo. Me fui de Argentina porque no me gusta hacer negocios relacionados al Estado, soy muy escéptico. No le pongo expectativa a sacarle nada, más bien una experiencia personal. Me ayuda a generar confianza en los stakeholders de mi compañía, empleados, clientes, etc.. Te genera un valor, son pequeñas validaciones que se te van dando. Algo que le da confianza a quien tiene que confiar en vos. A la larga es muy claro esto de construir reputación. Y como acá las instituciones tienen prestigio, esto te válida.

LPO/Enrique Tubio

¿Cómo está constituida Lazo, tu empresa que los Founder Familia vendieron como caso exitoso a la Casa Blanca?

Lo que hacemos es resolver un problema que tienen los emprendedores en sus momentos iniciales. Cuando están en una startup, estás muy focalizado en el producto, en vender tu solución, en convencer a la gente, y todo lo que tiene que ver con lo legal, financiero, contable y fiscal es la última prioridad. Lo que estamos resolviendo es sacarle todo ese problema al emprendedor. Lo que hacemos es unirlo todo en un único lugar para que el founder sepa que está estructurada toda la información y cuando quiere levantar capital está ahí la información para los inversores y con números confiables. Nuestro foco es ser la solución número uno. Ya hemos en 18 meses trabajado con más de 500 startups y tenemos recurrentemente a más de 130 compañías que pagan todos los meses.

Siendo un emprendedor latino que venís de otro país y otros mercados, ¿cómo se encara el desafío de salir a conquistar un mercado tan grande como el de Estados Unidos?

Acá hay muchas más oportunidades. Hay más capital, pero es todo mucho más competitivo. Si queremos ser los número uno, tenemos que saber que vamos a competir con los mejores. Y tenemos que querer ser los mejores. Este es el mercado más competitivo del mundo. Pero si te esfuerzas y te va bien, es otra cosa. América Latina es menos competitiva pero es todo camino de tierra. Esa es la gran diferencia.

¿Y se puede lograr el "sueño americano"?

A nosotros, al menos en Argentina, nos enseñaron a ser "cabeza de ratón o cola de león". Y acá se puede ser "cabeza de león" si uno quiere. Hay un cambio de mentalidad muy importante. Es cierto que si sos latino es mucho más complejo, si bien se ve un crecimiento de la comunidad latina y hay una oportunidad, es más complejo. Para un inversor, invertir en un emprendedor como yo que soy de Trenque Lauquen (D.del R: es una ciudad de 47.000 habitantes en la Provincia de Buenos Aires, Argentina) es más riesgoso que invertir en una persona que salió de Harvard o de un banco de inversión. Por más que yo muestre tracción no va a cambiar. Sí va a cambiar en la medida que los "underrepresented" o subestimados como nosotros generemos retorno a los inversores y eso logre más confianza.

¿Y cuál es la clave entonces para emprender y sacar a flote una compañía?

La única forma para gente como nosotros es trabajar duro, tener determinación, persistencia y seguir adelante. En este país sí se puede, por más que vengas de abajo y te pueda costar más. Pero mientras haya más personas que vayan para adelante, se va a generar más inversión y se verá menos riesgoso invertir en personas como nosotros. Estas validaciones, por lo de Kamala, sirven. Me reduce el riesgo que tengo como compañía. Todo reduce el riesgo. Y la realidad es que si vas para adelante y con determinación y persistes es difícil que a larga no te vaya bien.

LPO/Enrique Tubio

¿El apoyo de las organizaciones que hacen más visibles las startups latinas ayuda o todavía es marginal?

Founder Familia y VCFamilia hacen que crezca el ecosistema y muestra que cada vez hay más organizaciones y fondos que invierten en underrepresented founders. Pero todo esto es un proceso lento, que llevará años. Para los latinos el esfuerzo de levantar capital es el doble, y eso no va a cambiar de un día para el otro. Pero hay cosas que se van a ir dando. Estados Unidos se está dando cuenta del poder que tienen los latinos en este país. Yo creo que en algún momento tendrá un presidente de origen latino, este mercado es gigante. 

Pero mientras haya más personas que vayan para adelante, se va a generar más inversión y se verá menos riesgoso invertir en personas como nosotros. Estas validaciones, por lo de Kamala, sirven. Me reduce el riesgo que tengo como compañía

¿Debería haber políticas gubernamentales para emprendedores latinos o todo queda en manos del mercado o la meritocracia?

No creo que haya que regalarle nada a nadie. Sí hay que visibilizar, concientizar. Que el sector público ayude a que haya más empresas. No sé si hay que dar tanta subvención o acceso al crédito, no se. Sí saber que tenemos una desventaja y tener políticas para que eso no sea una desventaja.

¿Cuál es el futuro del proyecto, de la compañía? ¿Qué te ves haciendo en un par de años?

Mi mundo ideal sería armar un centro de operación en Trenque Lauquen, ese sería mi sueño. Mostrar que desde cualquier lugar del mundo se puede estar trabajando para todo el mundo. Tener una compañía basada acá en Miami pero que mucha gente pueda estar trabajando desde Trenque Lauquen. Ese sería mi sueño. Hacer una compañía que genere valor, que en algún momento nos permitirá seguir creciendo y el incentivo a que pueda cotizar en Bolsa y llegar a valer mucho.