Junio renovó la caída de las ventas por la pérdida de capacidad adquisitiva. Es el sexto mes consecutivo de pérdida de poder de compra de los consumidores. Como consecuencia, las ventas minoristas ya acumulan seis meses de caída. En lo que va del año, registraron una caída promedio interanual de 6,4%.

Según el informe mensual de la consultora en economía y finanzas FyE Consult, “el fuerte incremento de los precios domésticos, que alcanzó niveles del 47,1% interanual en la Ciudad de Buenos Aires en junio” y el debilitamiento de la demanda laboral “que presentó una merma del 1,3% en el caso de los asalariados privados formales entre noviembre y abril último” fueron las causas principales del deterioro del poder de compra de los consumidores.

Entre otras causas, el reporte destaca a la postergación de las paritarias, “que está moderando el ritmo de incremento salarial interanual (30/35% salarios formales promedio)” y la política monetaria contractiva adoptada por el Banco Central que retrajo la demanda y oferta de crédito a las familias, 2al pasar del 36,7% al 26,6% interanuales entre noviembre y junio último.”

Así, la Capacidad de Compra de las Familias FyE (CCF-FyE) experimentó una contracción del 11,5% con relación a igual mes del año anterior. En mayo la contracción había sido de 11,2%. Así, el deterioro mostró un ritmo superior al del “primer trimestre del año (-4,6% interanual), según nuestras estimaciones”, comparó el economista Hernán Hirsch.

La CCF es una medición del conjunto de la masa salarial y el nivel de crédito disponible para el consumo total del economía.

FyE Consult

En consecuencia la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó una disminución de las ventas al por menor del 9,8% en junio respecto de igual mes de 2015. En marzo, la caída interanual había sido del 5,8%. Las paritarias y las estrategias comerciales no consiguieron atajar la retracción del consumo. En efecto, ésta la caída más pronunciada desde 2009 (pleno impacto de la crisis financiera internacional)”, recordó Hirsch.

La inflación, la postergación de los incrementos salariales y el escaso crédito al sector privado llevan a proyectar “caídas interanuales importantes para los próximos tres meses” de la Capacidad de Consumo de las Familias.

Por su parte, Cámara Argentina de Comerciantes Mayoristas e Industriales (Cadmira) destacó que pese a “las medidas que han tomado (los comerciantes de Capital Federal y Gran Buenos Aires) para reducir el impacto de la recesión”, entre las que figuran “revisar gastos y desacelerar proyectos de inversión, impulsar ofertas por cantidad, restringir la contratación de personal, no contraer deudas, sacrificar márgenes de rentabilidad y lograr una política de ventas más agresiva”, durante el primer semestre una caída en sus ventas “superior al 25 por ciento” comparado con el mismo período de 2015. Para ellos, la principal causa detrás de la caída de las ventas es la inflación y la recesión económica.

Consultado sobre la posibilidad de un repunte del poder adquisitivo y de las ventas, Hirsch adelantó que no lo ve factible en el corto plazo debido a “ el comportamiento inercial de los precios domésticos” que seguirán con alzas aunque algo menores hasta alcanzar “en los próximos meses incrementos interanuales superiores al 45% tomando la inflación de la Ciudad de Buenos Aires”.

Para Hirsch, además de la inflación, la postergación de los incrementos salariales y el escaso crédito al sector privado llevan a proyectar en el futuro inmediato “caídas interanuales importantes para los próximos tres meses” de la Capacidad de Consumo de las Familias.