El secretario de seguridad de la Nación, Sergio Berni, pidió una legislación que permita deportar a delincuentes extranjeros. El funcionario profundizó su malestar contra chilenos y colombianos en un cable promovido por la agencia oficial Télam, que además difundió fotos de su aparición en un operativo contra delincuentes "chilenos", como subrayó la agencia estatal en los epígrafes.

"Así como la semana pasada estuvimos debatiendo si en la Argentina podemos hacer piquetes en la ruta o no, es el momento de debatir esto. Estos son cinco delincuentes de nacionalidad chilena, hoy detuvimos a otros cinco de nacionalidad colombiana, en modalidad de robo o hurto, pero ¿cuándo se convierten en asesinos? en momentos como estos", afirmó Berni que no suele tener pruritos progres para decir lo que piensa.

De hecho, fue desde esas posturas duras -claramente habilitadas por Cristina y que acaso expliquen la simpatía que despierta en crecientes sectores sociales hartos del discurso garantista-, que Berni se cruzó primero con la diputada ultrakirchnerista Diana Conti y después con la periodista oficialista Cynthia García.

Berni instrumentó así como parte del giro xenofóbico del Gobierno una estudiada puesta en escena haciéndose presente para hablar con la prensa en el supermercado Disco de Belgrano y Entre Ríos, en el barrio porteño de Balvanera, donde fueron detenidos cuatro hombres y una mujer de nacionalidad chilena cuando escapaban tras robar un auto en el estacionamiento. 

Su aparición, que obviamente fue anticipada a los medios, fue amplificada por la agencia oficial Télam con una profusa cantidad de fotos, en cuyos epígrafes se subrayaba que los delincuentes eran "chilenos".

Lo curioso es la impunidad política de Berni para avanzar con estas posiciones, que recuerdan pronunciamientos similares de Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta durante la crisis por la ocupación del Parque Indoamericano y que motivaron encendidas denuncias de xenofobia del kirchnerismo.

Cristina y el kirchnerismo núcleo duro que integran Luis D´Elía, Emilio Pérsico y La Cámpora entre otros grupos que se reunieron recientemente en el Luna Park, suelen levantar la bandera de la Patria Grande y la hermanan latinoamericana, discurso habitual también en la propia Cristina Kirchner.

"Este fin de semana detuvimos a 60 delincuentes extranjeros que vinieron a la Argentina solamente a delinquir, la mayoría reincidentes. Esto responde a la laxitud de la Justicia. Quiero pedirles a los legisladores, que así como estamos en la calle nosotros todos los días, ponemos todo el esfuerzo... que se sienten a legislar y den herramientas a la justicia para que estos delincuentes que vienen a la argentina a delinquir vuelvan a su lugar de origen", enfatizó Berni, quien si bien aclaró que "no son declaraciones xenófobas", es evidente que atiza la unión de los conceptos de inmigrante y delincuente.

Incluso, el secretario se enredó cuando atribuyó a los legisladores un problema de la justicia y en todo caso de la deficiente instrucción policial. "Acá cuando un extranjero delinque, cuando cumple el 50 por ciento de la condena puede ser deportado. El problema es que del 100 por ciento de los detenidos, solo el 3 por ciento tiene un juicio y ni hablar de una sentencia. Les pido a los legisladores que esta suerte de saco roto que nos pasa todos los días, que detenemos delincuentes menores, que en cuestión de segundos pasan a ser asesinos, que le den la respuesta a la sociedad, la que se merece".

"No es una declaración xenófoba, pero hay que terminar con este flagelo", concluyó.