Las perspectivas para el sector energético se volvieron pesimistas de la mano de una recesión que limitará el precio del petróleo para los exportadores. El dato surgió de una encuesta del Banco de la Reserva Federal de Dallas que entrevistó a ejecutivos de 152 empresas de energía de Texas, New México y Louisiana.

"Nos estamos preparando para nuevos aumentos de costos en 2023. Esto se da en un contexto de incertidumbre en los precios de las materias primas y temores de destrucción de la demanda debido a la recesión", dijo un ejecutivo en la encuesta.

En promedio, la mayoría de los empresarios dijo que esperaban que el West Texas Intermediate, el valor de referencia para el precio del petróleo, alcanzara un promedio de $ 84 por barril para fines de 2023 versus los $78,66 actuales. 

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Una prima de riesgo geopolítico que emana de la guerra en Ucrania ayudó a impulsar al WTI a su punto más alto de $122,11 por barril el 8 de junio, aunque las preocupaciones sobre una recesión mundial y los ajustes del mercado para amortiguar la suba del petróleo (con la liberación de las reservas estratégica de energía dispuesta por Biden para aplastar el precio) han hecho bajar el precio desde entonces. 

Los empresarios del sector dijeron que el costo de los materiales, los cuellos de botella en la cadena de suministro y la escasez de mano de obra son una preocupación creciente. Además, señalaron a la inflación como tema prioritario en exploración y producción

De hecho, la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR) cayó a su nivel más bajo desde 1983 la semana pasada cuando los precios de la gasolina y del petróleo aumentaron. El nivel de SPR, una reserva de emergencia de petróleo crudo administrada por el Departamento de Energía (DOE), disminuyó a 375,1 millones de barriles la semana pasada, marcando la primera vez que cae por debajo de 378 millones de barriles desde diciembre de 1983. 

La Fed de Dallas dijo que la mayoría de las compañías de petróleo alcanzarán el punto de equilibrio siempre que el WTI esté en el rango medio a bajo de $60. "La caída en el precio del petróleo es motivo de cierta preocupación porque estamos involucrados en un nivel mucho más alto de perforación en comparación con hace un año", dijo un encuestado, que no fue revelado en el informe oficial. 

"Nuestra economía se calculó en alrededor de $80 por barril de petróleo, y eso podría disminuir en los próximos meses", advirtió.

Sin embargo, la encuesta de la Fed mostró que la actividad en el sector de petróleo y gas de Texas aumentó durante gran parte del cuarto trimestre. El proveedor de datos del sector energético Enverus mostró que el recuento de plataformas al 21 de diciembre fue aproximadamente un 20% más alto que el año pasado. Había 333 plataformas trabajando en la cuenca de Permian en Texas, un nivel que no se veía desde marzo de 2020. 

El nivel de SPR, una reserva de emergencia de petróleo crudo administrada por el Departamento de Energía (DOE), disminuyó a 375,1 millones de barriles la semana pasada, marcando la primera vez que cae por debajo de 378 millones de barriles desde diciembre de 1983

Sin embargo, los empresarios del sector dijeron que el costo de los materiales, los cuellos de botella en la cadena de suministro y la escasez de mano de obra son una preocupación creciente. "La inflación sigue siendo un tema prioritario en exploración y producción. Nos estamos preparando para nuevos aumentos de costos en 2023", alertaron.

En general, los ejecutivos encuestados se mostraron menos optimistas sobre el futuro y el índice de perspectivas de la empresa cayó de 20 puntos a 13,1, por debajo del promedio de la serie. El índice de incertidumbre de las perspectivas saltó a 40,1 desde 35,7 el trimestre anterior. 

Finalmente, las empresas informaron su octavo trimestre consecutivo de aumento de costos, a pesar de que el ritmo de entrada de costos disminuyó a 61,8 durante el cuarto trimestre desde 83,9 el trimestre anterior.