La Corte Suprema ordenó tomar juramento a los cuatro diputados elegidos por sus bloques para integrar el Consejo de la Magistratura, entre ellos la radical Roxana Reyes, cuyo nombramiento había sido considerado ilegítimo por un fallo del juez Martín Cormick, que antes de ser juez fue funcionario kirchnerista.

La decisión de Cormick se interpretó en tribunales como una devolución de favores del kirchnerismo al anterior fallo de la Corte que impidió asumir en la Magistratura al senador oficialista Martín Doñate, aduciendo que la división del bloque peronista que pergueñó Cristina Kirchner para sumar un representante en ese órgano era ilegítima.

Este jueves, con la firma de Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Rosenkrantz, a través de una acordada, la Corte consideró invalida la resolución de Cecilia Moreau, que a partir del fallo de Cormick suspendió la designación de los diputados para integrar la Magistratura en el mandato que inició el 18 de noviembre y continúa hasta 2026. 

Los elegidos para ser consejeros en el organismo que selecciona y sanciona jueces fueron los oficialistas Rodolfo Tailhade y Vanesa Siley; y por la oposición el macrista Álvaro González y la radical Reyes.

Moreau apeló el fallo que cuestiona a la radical Reyes en la Magistratura, pero dejó en suspenso su designación 

Cormick cuestionó la designación de Reyes para el mandato que vencía porque ocupa el lugar de la segunda minoría y la primera es del PRO. Entendió que la ley vigente hace un año, interpretada por un fallo de la Corte, asigna esos lugares a fuerzas distintas no se cumple porque la UCR y el PRO compartieron frente electoral.

La Corte consideró que la resolución de Moreau que suspendió las designaciones en la Magistratura no es válida porque refiere a una sentencia que no aludía a los mandatos vigentes. Por eso les tomará juramento a los diputados, incluida la radical Reyes. 

Pero para la Corte, que tiene a cargo la presidencia de la Magistratura, la sentencia se refiere al mandato vencido y no es válida para los vigentes, porque fue firmada cuando ya habían sido ratificados por Moreau en la resolución que luego pidió revisar. 

"Es evidente entonces que la sentencia no anuló esas designaciones y no puede en modo alguno anular resoluciones futuras", señalaron los jueces del máximo tribunal. Incluso consideraron en una crítica al juez, que este falló "en abstracto" porque "el objeto del pleito fue la designación de la diputada Reyes para el período anterior" y "al momento en que se dictó la sentencia, ese mandato de Reyes había concluido, con lo cual la sentencia falló en abstracto". 

La diputada Reyes junto a sus compañeros del bloque radical.

LPOJuan Casas

Los jueces de la Corte justificaron su derecho a supervisar las resoluciones de Diputados,  para determinar que "hayan cumplido los procedimientos mínimos que establece la ley". En este caso consideraron que la decisión inicial de Moreau de avalar las designaciones es válida y no así la siguiente de revisarlas. "Lo que la Corte hizo en la acordada fue ejercer un mínimo control del debido proceso legislativo", señalaron fuentes judiciales.

También cuestionaron que Moreau no le dio intervención a los bloques para decidir su revisión, que fue cuestionada por Juntos por el Cambio en una sesión escandalosa y le impidió ser reelegida por votación como presidenta de la Cámara.

Las instituciones no se pueden manosear y mucho menos paralizar por indicación de CFK. Se lo dijimos a la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, cuando decidió intentar trabar la conformación del Consejo.

En la oposición celebraron la acordada de la Corte, que podría allanar el camino para reabrir el recinto. "Las instituciones no se pueden manosear y mucho menos paralizar por indicación de CFK. Se lo dijimos a la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, cuando decidió intentar trabar la conformación del Consejo", posteó el jefe de la UCR Mario Negri. 

En el kirchnerismo no hubo reacción, porque esperan la definición sobre los cuatro senadores elegidos para la Magistratura, tres oficialistas a partir de una división táctica del Frente de Todos en abril, que les permitió asignarle el representante de la segunda minoría a Martín Doñate, de Unidad Ciudadana. 

La Corte consideró inválida esa maniobra recién una semana antes de finalizar los mandatos, pero Cristina volvió a avalarla para el que se inició el 18 de noviembre. El senador del PRO, Luis Juez, reclama el lugar de Doñate y le pidió al máximo tribunal que defina la situación. Todavía no lo hizo.