Pedro Sánchez aprovechó su intervención en el pleno del Congreso para anunciar un nuevo paquete de medidas para contrarrestar la crisis energética y marcar la diferencia con las propuestas del PP. El presidente dijo que el próximo martes el Consejo de Ministros aprobará un conjunto de ayudas por un valor de 3000 millones de euros que, según los cálculos de Hacienda, llegará al 40% de los hogares. 

Moncloa ha dado el visto bueno a una nueva tarifa regulada para las comunidades de vecinos con calefacción centralizada que funciona a gas natural y que, hasta finales de 2023, limita el incremento trimestral de precios: alcanzará a 1,7 millones de hogares. Por otra parte, el Ejecutivo garantizará el bono social que cubre ya a 1,3 millones de hogares para acceder al descuento en las facturas eléctricas. 

Moncloa eleva la financiación a las CCAA en medio de la batalla fiscal con una transferencia récord en 2023

Los porcentajes de descuento varían según se acojan a las categorías de consumidores vulnerables o consumidores vulnerables severos. Por otra parte, el presidente se comprometió a facilitar las contrataciones en las provincias de Cuenca, Teruel y Soria, las menos pobladas del país, a través de la reducción de las cotizaciones en los contratos indefinidos. 

Moncloa ha dado el visto bueno a una nueva tarifa regulada para las comunidades de vecinos con calefacción centralizada que funciona a gas natural y que, hasta finales de 2023, limita el incremento trimestral de precios: alcanzará a 1,7 millones de hogares

"Vamos a fortalecer el tejido productivo creando nuevas oportunidades en estos pequeños municipios", sostuvo en un claro mensaje a la llamada "España vaciada". Frente a las acusaciones de los grupos parlamentarios, Sánchez defendió el Estado de Bienestar y apuntó a las políticas del PP. "Las recetas de Feijóo son las mismas que Rajoy, la vuelta al peor de nuestros pasados, la precariedad y desigualdad", disparó. 

El líder socialista responsabilizó a los populares por haber aplicado una agenda "neoliberal del sálvese quien pueda" en la anterior legislatura. "La realidad es que recibimos mucho más de lo que pagamos por nuestros impuestos", dijo en alusión al sistema fiscal que postulan desde Génova. 

Las recetas de Feijóo son las mismas que Rajoy, la vuelta al peor de nuestros pasados, la precariedad y desigualdad

Sánchez también ponderó el mecanismo de excepción ibérica que le permitió a España un ahorro de 2800 millones euros y que ahora evalúa la UE. "Si evidencia algo es la ceguera y el negacionismo de una oposición que solo se ha dedicado durante esta legislatura, con la pandemia y ahora con la guerra, a acosar y a tratar de derribar al Gobierno y no ayudar al país en momentos críticos", afirmó. El presidente respondió a los embates de los distintos grupos parlamentarios, pero especialmente a las bancadas de la derecha. 

Cuca Gamarra, portavoz del PP, le afeó que "confunde el Estado del Bienestar con el suyo y el de su gobierno", mientras que el líder de Vox, Santiago Abascal, calificó las medidas del oficialismo de "es pan para hoy y hambre para mañana". 

Inés Arrimadas, presidenta de Ciudadanos, fue por el mismo camino: "Claro que los jubilados se merecen su pensión, pero no que les usen para su campaña electoral". Sánchez le contestó a Arrimadas que equiparar la suba de pensiones con la compra de voluntades "es clasismo". "Hay 10 millones de pensionistas y ninguno de ellos, vote a quien vote o piense lo que piense, merece que se le falte al respeto asumiendo que su voto cambiará por una subida de la pensión", dijo.