Menos de 48 horas les alcanzaron a los socios cordobeses de Juntos para entender que el despliegue territorial que comenzó el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, va en serio. Entre el jueves y el viernes, el hombre del PRO hizo escala en Marcos Juárez, donde se vota el próximo domingo, recorrió San Francisco y Arroyito al lado del senador Luis Juez, y concluyó la gira con una recorrida por la capital cordobesa ratificando que la coalición está dispuesta a arrebatarle la gobernación al peronismo de Juan Schiaretti.

A poco de haber iniciado la puesta en marcha de una estructura que tiene como armadores a Marcelo Wechsler, y en Córdoba a Oscar Agost Carreño, Darío Capitani y Gabriel Frizza; Larreta mostró un despliegue con ambiciones de cara al 2023. Y donde muchos, creen que además de definiciones públicas en torno a la elección de Marcos Juárez o la parada provincial del año próximo, empezó a puntear una eventual lista de diputados para el 2023.

"Ese punteo ya empezó. Él sabe que la pelea de fondo se la juega en las Paso, que todo lo va a poner ahí, y que, si es ganando la provincia antes, mejor. Pero lo importante lo va a jugar en agosto", reconoció una persona que siguió el minuto a minuto del alcalde porteño en Córdoba.

Igual, el fuerte gesto hacia Juez, con quien viajó desde el aeropuerto de San Fernando y compartió casi los dos días, es una señal a la pelea provincial. "Estamos trabajando todos juntos para ganar la gobernación de Córdoba. Y las candidaturas acá las tienen que definir los cordobeses, no tiene que venir nadie de afuera a decirles qué hacer", dijo en la conferencia de prensa en la mañana de este viernes en Córdoba.

Todo un guiño a Juez y un mensaje por elevación al expresidente Mauricio Macri que hace unas semanas intentó empujar al senador a una interna con el radical Rodrigo de Loredo y el PRO.

De hecho, entre los amarillos, con quienes se reunió en soledad en la noche del jueves entienden que el candidato cordobés de Larreta es el senador. Cena a la que no fueron invitadas las dos jugadoras de Patricia Bullrich en Córdoba: la diputada Laura Rodríguez Machado y la senadora Carmen Álvarez Rivero.

"No hubo vacío ni faltazo, simplemente no se las invitó", confió una fuente que reconoció que el encuentro fue del larretismo incipiente y con los macristas Gustavo Santos y Soher El Sukaría. Con quienes también recorrió la peatonal cordobesa en la mañana de este viernes.

Antes, hubo una reunión transversal con varios actores de Juntos, y es lo que explica la lógica del alcalde porteño de no cerrarse en el sello amarillo; abrir el diálogo a otros sectores.

Entienden en Córdoba que Larreta aventaja a Macri y Bullrich con esas estrategias. Al primero, por no cerrarse en la musculatura propia de su partido y saber de la necesidad de contener a todos los socios; y a la segunda, porque la exministra queda expuesta en su rol de presidenta del partido si no abre la invitación al resto.

De hecho, para con Bullrich tuvo una definición importante en el almuerzo de la Bolsa de Comercio: "mis diferencias con Patricia, si son bien manejadas, nos enriquecen".

Volviendo al punteo 2023, también a diferencia de sus socios amarillos le dio un protagonismo a Mario Negri que los otros no le habían otorgado al viejo caudillo radical. "Mario puede ser el que encabeza la lista de Diputados, Soher puede entrar en el segundo lugar, y después no hay que descartar a la Coalición Cívica si hay un acuerdo importante con (Elisa) Carrió", razonan algunos.

Por esto, la presencia del presidente del partido de Carrió, Gregorio Hernández Maqueda, también fue seguida de cerca.

La transversalidad de Larreta en Córdoba incluye además a la diputada de la UCR, Soledad Carrizo, con quien tiene un vínculo fluido y también fue parte del encuentro de hoy. De todas maneras, la radical tiene mandato hasta 2025 en la Cámara baja; al igual que Héctor Baldassi, quien también aseguró su continuidad el año pasado e integra las filas del larretismo.

En tanto, un ausente que negocia un ingreso a una lista para Diputados fue el radical Ramón Mestre. El exintendente es parte de la estructura del jujeño Gerardo Morales, con quien Larreta ni Negri atraviesan una buena relación.

De todas maneras, sí estuvo el diputado Hugo Romero, exfuncionario de Mestre y hombre de confianza del extitular del Palacio 6 de Julio