Con la presa El Cuchillo seca y el resto al mínimo de su capacidad, el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó un plan de apoyo para Nuevo León que incluye inversiones por más de 20,000 millones de pesos para garantizar el agua por 10 años y convierte la crisis en un tema de seguridad nacional.

Con este decreto presidencial, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, aseguró también que el gobierno de Samuel García podrá disponer el agua brindada en concesiones a los privados para priorizar el consumo doméstico.

"Se faculta a la Comisión Nacional del Agua para apoyar y coordinar los esfuerzos de operación del organismo estatal de agua potable y para disponer, previo acuerdo, como se ha venido haciendo con los concesionarios, de la totalidad del agua concesionada", declaró.

Con esto, la Conagua podrá celebrar convenios con los concecionarios para hacer uso del vital líquido, que quedarán a competencia de Agua y Drenaje y será esta la encargada de cubrir el pago de derechos conforme a la cuota de uso público urbano, además se perdonará a los privados del pago de derecho del agua mientras dure la nueva medida.

Este acuerdo contempla trabajos para garantizar el acceso a agua potable durante la siguiente década en 18 municipios del área metropolitana que actualmente sufren un déficit de 3,000 litros por segundo.

"Quizás, siendo estrictos en nuestra valoración, las soluciones que nosotros estamos proponiendo nos van a permitir seguir trabajando hacia adelante" declaró el presidente, "Y ya vienen otras autoridades para que se continúe invirtiendo y se amplíe el plazo, pero nos comprometemos a que antes de que termine este Gobierno se tenga abasto de agua para 8 o 10 años hacia adelante, empezando ahora con este plan de reforzamiento".

El titular de Conagua, Germán Martínez, habló sobre el plan de financiamiento de 15,700 millones de pesos para la presa El Cuchillo a través de Banobras que también recibirá una aportación de 3,500 millones de la administración estatal, aunque los intereses que se generen del crédito serán cubiertos por el gobierno federal.

Sobre la Presa Libertad, reiteró la urgencia del ejecutivo para que se termine en 2023 con la que se aportarán 1,500 litros por segundo con una inversión 1,118 millones de pesos.