Gustavo Béliz renunció a la secretaría de Asuntos Estratégicos y Alberto Fernández se quedó sin uno de sus principales colaboradores mientras se habla de más cambios en la Rosada.

Béliz acompañó a Alberto desde el primer día de su gestión y tenía su despacho a metros del presidente. Pero arrastraba una mala relación con varios dirigentes de peso del Frente de Todos. Uno de ellos es Sergio Massa, con quien tuvo un áspero intercambio en Olivos y enfrente del Presidente, en la anterior crisis de Gabinete que terminó con la designación de Silvina Batakis en Economía.

Exclusivo: Béliz toma el control de la Cumbre de las Américas y desactiva el encuentro contra Estados Unidos

En la Rosada corren versiones que hablan de la salida de otros colaboradores estrechos de Alberto. También se mencionaba la salida de Vilma Ibarra, verdadera jefa del albertismo. Serían palabras mayores y por eso cerca del presidente se apresuraron a desmentir a LPO que Vilma deje el Gobierno.

El posible arribo de Massa a manejar todas las áreas económicas implicaba un choque inevitable con Béliz, que logró concentrar la administración de todos los créditos internacionales, resorte clave que utilizó para bloquear líneas de crédito centrales de China, como las que financian las represas de Santa Cruz y la central nuclear de Atucha III, proyectos emblemáticos para el kirchnerismo.

Fotografía HCSN

Esto generó una guerra del cristinismo contra Béliz, a quien identificaron como un agente de los Estados Unidos en el Gobierno, enfocado en boicotear las relaciones de la Argentina con China y Rusia. El enfrentamiento fue tan abierto que el senador Oscar Parrilli motorizó su citación al Senado para que explique porque boicoteaba proyectos claves para el país. Béliz logro evitar cumplir con la citación del Congreso hasta su renuncia. 

Pero además tenía fuertes cuestionamientos internos de colegas del albertismo que no entendían que aporte hacía al Gobierno. "¿Para qué está Beliz? ¿Qué función cumple? ¿Cual es su aporte? ¿Quien lo puso ahi?", fue la reflexión de un funcionario del albertismo.

En la Casa Rosada se comenta que en su designación también habría pesado una sugerencia del Papa Francisco.

Béliz había propiciado una derrota diplomática de la Argentina cuando se candidateó para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).  El ahora ex funcionario se bajó de la carrera al notar que el conteo le daba 16 votos a favor contra los 30 que tenía asegurados el norteamericano Mauricio Claver Carone. 

En el Gobierno se lamentan por el fracaso de Béliz en la CAF: "Es un 9 sin gol" 

Carone se convirtió en enemigo de la administración de Alberto desde entonces y esta semana advirtió que no liberará 500 millones de dólares para la Argentina por su "tumultuoso historial financiero".  Sin embargo, la entidad aprobó otra línea de crédito para el país y desembolsará 200 millones de dólares. De todos modos, la gestión de Béliz como gestor de los créditos multilaterales quedó seriamente cuestionada esta semana y habría sido uno de los motivos de su salida.

Otro fracaso internacional de Béliz se dio con la elección del presidente de la Corporación Andina de Fomento (CAF). el segundo organismo de crédito más importante de la región después del BID. Béliz había conseguido, desde su silla de director, darle el empujón final al peruano Luis Carranza, que dejó la presidencia en marzo de 2021 en medio de denuncias de acoso.  La salida de Carranza abrió la esperanza para Argentina para quedarse con la presidencia y para eso Béliz impulsó a Christian Asinelli. Pero Béliz no consiguió los votos y Asinelli se debió conformar con una de las vicepresidencias del organismo.