La tensión entre Palacio Nacional y Alejandro Morena Cárdenas es total. El dirigente del PRI reveló ayer un explosivo audio de una llamada telefónica que recibió de Manuel Velasco. En esa plática, el senador del Verde le comunica a Alito que se había reunido con Adán Augusto y que si los diputados del PRI no acompañan la reforma eléctrica de AMLO, desde Palacio "se irían con todo" en su contra.

Como explicó LPO, se trata de un audio con impactos incalculables. En primer lugar, porque el interlocutor vuelve a ser Manuel Velasco, el puente permanente que encontró López Obrador con el establishment priista. El senador del Verde siempre ofició como mediador desde la campaña de 2018. A tal punto que hasta sus empleados filmaban las entregas de dinero que le hacían a los familiares de AMLO.

Pero además, el audio impacta bajo la línea de flotación de Adán Augusto, porque el titular de la Segob estaba construyendo la imagen de un funcionario abierto, moderado y dialoguista. Un puente con sectores -empresarios, opositores, ministros de la Corte- que transitaban una relación incómoda con Palacio.

En su conferencia de prensa matutina, se le preguntó a López Obrador por su opinión sobre la llamada publicada. "No es cierto, yo no me meto en esas cosas y nunca lo he hecho. Es un asunto de principios, de ideales, de moral", respondió AMLO, con cierto fastidio.

López Obrador se quiso despegar de Velasco y aseguró que tiene casi tres años sin hablar con el ex gobernador de Chiapas: "Sólo lo saludé el día de la inauguración del Aeropuerto Felipe Ángeles".

Además, el mandatario no quiso opinar sobre la reciente batalla de audio escándalos y llamadas filtradas: "No quiero hablar de eso y menos con las elecciones tan cercanas, tal vez pasándolas podamos hablar del tema.