El pleno de la Corte Suprema de Brasil aprobó la condena a 8 años y 9 meses de prision para el diputado de ultraderecha Daniel Silveira, por cometer "actos antidemocráticos" contra el máximo tribunal y sus integrantes. La votación terminó 10 a 1 con el voto en negativo del juez Kássio Nunes Marques y la particularidad del voto positivo del magistrado evangélico designado por Bolsonaro, André Mendonça, que generó la ira del bolsonarismo.
Sin embargo, a menos de 24 horas de la definición de la Corte, Jair Bolsonaro decidió indultarlo en una medida que aumenta la tensión con el máximo nivel del Poder Judicial. El presidente brasileño justificó la decisión en una transmisión en vivo desde sus redes sociales en donde dijo: "Esta es una noticia extremadamente importante para nuestra democracia y nuestra libertad. Es un documento en el que empecé a trabajar desde ayer, cuando el diputado federal Daniel Silveira fue encarcelado por 8 años y 9 meses", dijo Bolsonaro.
La Corte Suprema de Brasil ordena la detención de un diputado de Bolsonaro
En el decreto, Bolsonaro argumenta que "la prerrogativa presidencial de otorgar indultos individuales es una medida fundamental para el mantenimiento del Estado Democrático de Derecho, inspirado en valores compartidos por una sociedad fraterna, justa y responsable", afirmando además que "la libertad de expresión es pilar esencial de la sociedad en todas sus manifestaciones". Señala, también, que "se le ha encomendado democráticamente la misión de velar por el interés público" y afirma "que la sociedad está en legÃtima conmoción, ante la condena de un parlamentario amparado por la inviolabilidad de opinión que otorga la Constitución, quienes sólo hicieron uso de su libertad de expresión".
Claudio Ladeira, profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Santa Catarina, dijo a LPO que "Bolsonaro es competente para conceder el indulto: lo ampara la Constitución, art. 84, en donde dice que corresponde exclusivamente al Presidente de la República: XII - conceder indultos y conmutar las penas, con audiencia, en su caso, de los órganos establecidos por la ley".
Ladeira sostuvo que "lamentablemente, en las próximas horas veremos a muchos juristas de izquierda argumentando que el tribunal es competente para anular el decreto con base en el "principio de proporcionalidad". Son los mismos que, en una eventual victoria de Lula, criticarán al STF en los próximos años cuando ponga trabas a actos de gobierno que, en cualquier democracia seria del mundo, son vistas como prerrogativas presidenciales". "Son los mismos juristas que criticaron la injerencia polÃtica del STF durante el gobierno de Dilma, cuando el tribunal actuó como lÃnea auxiliar del golpe", añadió.
Silveira fue condenado luego de llamar al juez Fachin "mocoso, malcriado, de mal carácter, marginal de la ley" y luego agregó que el ministro es "un vagabundo, un cretino y un sinvergüenza que forma parte de la mierda del STF".
Las agresiones no quedaron ahÃ. El diputado también dijo imaginar una agresión contra el ministro. "Cuántas veces me he imaginado que te golpean en la calle. ¿De qué vas a hablar? ¿Que estoy fomentando la violencia? No, me lo imaginé ". "Cualquier ciudadano que conjetura que una paliza en la cara con un gato muerto hasta que maúlla, preferiblemente después de cada comida, no es un delito", insistió.
En su momento, Silveira apuntó contra otros magistrados como Alexandre de Moraes a quien llamó "Xandão do PCC" en referencia a la facción criminal Primeiro Comando da Capital, una organización criminal surgida en los años noventa en el Centro de Rehabilitación Penitenciaria de Taubaté, a Luis Roberto Barroso a quien dijo "le gustan las pelotas moradas" y a Gilmar Mendes, hace una señal con los dedos indicando que le gusta el dinero.
El bolsonarista dijo solo respetar al presidente del tribunal, el ministro Luiz Fux, pero defendió la sustitución de los once ministros, a quienes acusó de "defecar" la Constitución. El parlamentario también defendió el Acta Institucional 5 ( AI-5) , un recurso de represión y tortura utilizado por la dictadura militar que fue reivindicado en varias ocasiones por los hijos de Bolsonaro. "Es necesario librar al paÃs de vagabundos comunistas", aseveró y luego advirtió: "Si haces tonterÃas, volveremos", en una clara referencia a la dictadura.
Daniel Silveira tiene vÃnculos con las milicias que fueron parte del asesinato de Marielle Franco en RÃo de Janeiro. En efecto, Silveira junto a Rogerio Amorim fue uno de los diputados que quebraron la señalización de calle en homenaje a la concejala.
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Brasil esta lleno de presos politicos silenciados por el poder de O Globo