Tristán Bauer tuvo una mala reunión con Juan Manzur y no pudo concretar la salida de Luis Puenzo como titular del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), tras el escándalo tras la protesta del lunes.

El jefe de Gabinete recibió a primera hora de la mañana a Bauer, que ayer había anticipado que va "haber cambios en el Incaa", dando a entender que echaría a Puenzo. 

Bauer intentó mostrar la foto con Manzur como la carta para desplazar al director de "La Historia Oficial". Pero la reunión no fue lo que esperaba. El encuentro ya estaba programado en la agenda del jefe de gabinete para analizar los números del sector cultural. "No podemos dar bolsones y tenemos que invertir en industrias culturales", le habría dicho Manzur a Bauer, según dijeron a LPO fuentes al tanto de la reunión.

Sobre el final del encuentro se tocó el tema del Incaa. Contrariamente a lo que esperaba Bauer, Manzur le dijo que la decisión de correr a Puenzo no estaba consensuada con jefatura de gobierno y tampoco con Alberto Fernández, por lo que iba a tener que esperar. Como anticipó LPO en exclusiva, el presidente había decidido resistir el avance del kirchnerismo sobre el titular del Incaa.

Sin el respaldo político de la Rosada, por la tarde Bauer recibió a Puenzo y luego de tres horas de reunión no pudo concretar su salida. Un sector del Gobierno incluso había filtrado la posibilidad de una intervención del organismo. Y Bauer proponía al vice del Incaa, Nicolás Batlle, para ocupar la presidencia de manera provisional.

Puenzo advirtió la debilidad de Bauer y dijo esta mañana que desde el Gobierno todavía no le pidieron la renuncia y aseguró que se enteró por los medios sobre esa posibilidad. Puenzo dijo que "no correspondería" que Bauer le pida la renuncia. "El INCAA es autárquico y tiene una categoría muy particular en la ley, que es un ente público no estatal", dijo el cineasta en diálogo con AM 750.

Alberto intenta salvar a Puenzo ante el avance de Bauer y Echarri

Si bien Puenzo está en la cuerda floja prácticamente desde que asumió, pero Alberto decidió sostenerlo para evitar el avance del Instituto Patria en su gabinete. Desde la semana pasada hay fuertes rumores de su salida, acelerados por el caos de ayer en la puerta del Instituto. 

Puenzo había logrado la semana pasada una muestra de apoyo de Alberto, que lo recibió en la Casa Rosada. Quien gestionó el encuentro fue el asesor presidencial Ricardo Forster, que se exhibe como el canciller cultural de Alberto y aparece como candidato a quedarse el Ministerio. Lucrecia Cardoso, número dos de Bauer en Cultura, es otra de las anotadas.

Es que tanto Forster como Puenzo y Manzur ven débil a Bauer luego de que fracasara su embestida para controlar el Incaa y por los problemas internos que tuvo en el ministerio que le trajeron problemas con La Cámpora en las últimas semanas. 

En primer lugar el Director Nacional de Diversidad y Cultura Comunitaria, Gianni Buono, renunció en malos modos con Bauer y fue rescatado por el gobierno de Axel Kicillof. Buono recaló como vicepresidente de Florencia Saintout en el Instituto Cultural de la provincia, con rango de ministerio. En tanto que este lunes, el kirchnerismo perdió otro funcionario en Cultura por la salida de Maximiliano Uceda, secretario de Gestión Cultural, anticipada por LPO.

En el medio de la pelea entre el albertismo y el kirchnerismo, trasciende también el rumor de que Manzur busca absorber el Incaa bajo la estructura de la secretaria de Medios y Comunicación Pública que dirige su vocera, Valeria Zapesochny. Por lo pronto, desde los equipos técnicos de jefatura de gabinete no hay cuestionamientos a los números del Incaa como los que hace Bauer.